En una jornada intensa, los taxistas recorrieron ayer los pasillos del Concejo Municipal en busca de un aumento inmediato del 30 por ciento en la tarifa frente al defasaje que tienen en los costos, según se desprende de sus estudios, por la fuerte inflación que atraviesa la economía nacional. Si bien en un principio hicieron público que iban a realizar mañana un quite de colaboración, ya que el pedido de suba para los viajes no se había tratado en la comisión de Servicios Públicos, finalmente decidieron dejar esa medida en suspenso y hoy durante la mañana se volverán a reunir para ver cómo sigue la cuestión con la cuenta regresiva en marcha.
El tesorero de la Cámara de Titulares de Taxis (Catiltar), José Iantosca, contó a este diario que mantuvieron distintas reuniones en el Palacio Vasallo “tratando de convencer a los bloques que voten por el aumento”.
“Vamos a ver si podemos lograr que el tema se trate directamente sobre tablas el próximo jueves. Tenemos fe en que se puede lograr. Mañana (por hoy) vamos a volver a reunirnos a las 9.30 todas las organizaciones de taxistas y allí se decidirá si hacemos un quite de colaboración. Creo que para cerca de las 11 de la mañana tendremos alguna resolución”, explicó.
“Lo que queremos es lo mismo que la semana pasada: que nos garanticen un aumento del 30 por ciento ya, de manera urgente, para luego discutir un nuevo aumento para agosto o septiembre. La misma Municipalidad hizo un estudio que le da arriba del 60 por ciento que no está lejos del que hicimos nosotros”, añadió.
El referente de los taxistas señaló que la situación “no se puede soportar más”. “Hoy el combustible se está llevando arriba del 15 por ciento de la recaudación. Vemos que un auto que costaba 150 mil pesos el año pasado este año cuesta 250 mil. El seguro costaba mil pesos el año pasado y este año ya superó los 1.800 pesos. Es imposible lo que estamos sufriendo para seguir subsistiendo. Nosotros sabemos que el bolsillo de la gente no da para bancar un solo ajuste, un solo aumento. Sabemos que nuestro techo es el bolsillo de la gente pero lamentablemente no podemos tener tanto defasaje”, indicó.
Por su parte, el titular de la Asociación de Taxistas Independientes (Atti), Mario Cesca, dijo que lo que se evalúa, si no hay respuestas favorables, es directamente cortar el crédito laboral, lo que equivaldría a un paro.
“Lamentablemente no podemos seguir trabajando más con el valor del GNC. El gobierno nacional aumenta de un día para el otro y ni siquiera le avisa a las municipalidades. El corte de crédito laboral significa que no tenemos plata para seguir trabajando. Esto no da para ninguna dilación más el estudio de costos dio arriba del 60 por ciento y estamos aceptando un 30 por ciento y encima no tienen voluntad de tratarlo, esto quiere decir directamente que no quieren que el servicio funcione”, analizó.
“Después de la reunión de la comisión de nos fuimos reuniendo con los concejales de los distintos bloques. Hay algunos que están dispuestos a rever su posición. Acá la cuestión pasa porque los concejales del PRO se negaron a analizar un aumento. Esto provocó que los del Frente para la Victoria dijeran «estos son los que aumentan todo, se niegan a aumentar las tarifas, nosotros vamos a votar que sí y ellos van a quedar como los que están en contra del aumento». Eso provocó que se frenara todo. Nosotros queremos que se despolitice el asunto porque es una cuestión que no podemos seguir así. Si ellos quieren se reúnen el miércoles (por mañana) y el jueves lo están votando en el recinto”, subrayó.
Por último –y sobre las amenazas de realizar un corte en el crédito laboral por parte de los taxistas– el presidente de la comisión de Servicios Públicos del Concejo Municipal, Carlos Comi, dijo que “cada uno tiene derecho a reclamar dentro de las vías democráticas”. “Ojalá no haya una medida de fuerza porque esto va a perjudicar a los usuarios y también al sector en un momento económico difícil. La cuestión se trató pero no hay consenso. Entendemos que hay una situación extraordinaria, que hay una explosión de algunas variables económicas que ameritan un tratamiento pero otros bloques requieren más tiempo y hacen otros análisis. Estamos en una situación compleja”, cerró.
Atentos por el caso Uber
Al igual que sus pares de Capital Federal, los taxistas locales se encuentran en pie de guerra frente a la posibilidad del desembarco de Uber en la ciudad.
El tesorero de la Cámara de Titulares de Taxis (Catiltar), José Iantosca, contó que con todas las organizaciones están analizando hacer movilizaciones por el tema.
“Vamos a pedir que tanto el Concejo como la Municipalidad y la provincia se expidan al respecto. Las condiciones para el desembarco están dadas porque vemos cómo empresas ilegales funcionan en Rosario con aplicaciones y nadie hace nada para combatirlo. Sabemos que durante el fin de semana hubo movimientos de Uber y eso es lo que nos preocupa. Hubo algunos mensajes diciendo que ya se iban a juntar haciendo capacitaciones y por lo tanto estamos en estado de alerta y movilización”, señaló.