El gobierno de Estados Unidos aclaró ayer que “ninguna de las medidas acordadas” con Irán, en el marco del acuerdo nuclear que la nación islámica firmó con un grupo de potencias, dejará sin efecto o modificará el pedido de captura internacional que Interpol impuso contra el general Ahmad Vahidi, en 2007, por su presunta participación en el atentado contra la Amia.
“Ninguna de las medidas acordadas en el Plan de Acción Integral Conjunto (JCPOA) concluido recientemente en relación con el programa nuclear de Irán afecta o anula el alerta roja emitido por Interpol para el general Vahidi con respecto al atentado de 1994 perpetrado en la Argentina”, precisaron fuentes del Departamento de Estado norteamericano.
De esta forma, el gobierno de Barack Hussein Obama respondió al pedido que el último miércoles hizo llegar el canciller Héctor Timerman al secretario de Estado norteamericano, John Kerry, y a la Alta Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Federica Mogherini, para saber si los acuerdos nucleares firmados con la República Islámica de Irán podrían beneficiar a uno de los acusados por el atentado a la Amia. “Las sanciones impuestas en Estados Unidos contra Vahidi, los cuerpos de Guardia Revolucionaria de Irán y sus oficiales continuarán vigentes debido a que fueron aplicadas por razones ajenas al alcance del Plan de Acción Integral Conjunto”, puntualizaron las fuentes estadounidenses.
Y aclararon que “las sanciones secundarias impuestas por Estados Unidos seguirán vigentes, lo cual implica que los bancos y empresas del extranjero podrían ser pasibles de sufrir sanciones si participan de transacciones con los mencionados individuos”.
Con respecto a la exclusión del general Vahidi de la lista de sanciones de la Unión Europea en el marco del JCPOA, las mismas fuentes plantearon que se acordó “levantar las sanciones contra los individuos incluidos en listados de las autoridades del ámbito nuclear”.
“En cuyo caso, tenemos entendido que no se levantarían las sanciones contra el general Vahidi por el término de ocho años”, advirtieron los voceros de la administración estadounidense.
Por último, señalaron que siguen “instando a la comunidad internacional y a las autoridades de Argentina a arbitrar todos los medios necesarios para que los perpetradores del atentado contra la Amia rindan cuentas por dicha atrocidad”.
Vahidi es uno de los cinco ex funcionarios iraníes que figuran con alerta roja de la policía internacional, por un pedido argentino contra nueve persas acusados en la Argentina de ser autores intelectuales del atentado contra la Amia perpetrado en 1994.
Empieza juicio por encubrimiento
Los miembros de la Unidad Fiscal de Investigación Amia destacaron la importancia del juicio oral por la desviación de la investigación del atentado contra la sede de la mutual judía, cuyo comienzo está previsto para el jueves próximo, y se mostraron esperanzados en que en el debate público surjan elementos que permitan conocer información sobre el ataque en sí mismo.
Los fiscales Sabrina Namer y Roberto Salum y el coordinador Juan Murray resaltaron en diálogo con Télam la importancia de que el juicio comience el 6 de agosto luego de postergarse su inicio en contadas oportunidades. “Lo importante es que este juicio comience. Para el Ministerio Público Fiscal y para las víctimas que reclaman justicia”, dijo Salum en referencia al debate oral en el que serán juzgados, entre otros, el ex presidente Carlos Menem, el ex jefe de la Side Hugo Anzorreguy, el ex titular de la Daia Rubén Beraja y el ex juez federal Juan José Galeano. Se juzgarán dos hechos: la orden de frenar la investigación de la “pista Siria” que incluía al sirio-libanés Alberto Kanoore Edul y el pago de soborno al imputado Carlos Telledín para que declarara una versión falsa sobre la elaboración del atentado.
“¿Van a denunciar a Obama?” ironizó Aníbal
“Quisiera saber si fiscales tan duros como han sido el doctor (Germán) Moldes, el doctor (Gerardo) Pollicita o el doctor Ricardo Sáenz van a presentar una denuncia penal contra el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, por encubrimiento, como han hecho en esa bochornosa presentación, acompañando esa presentación del doctor (Alberto) Nisman respecto de la presidenta de la Nación (Cristina Kirchner)”, ironizó ayer Aníbal Fernández en torno del acuerdo alcanzado por Washington, junto con otras potencias occidentales, con Irán en materia nuclear. El jefe de Gabinete se expresó ante la posibilidad, desmentida por el Departamento de Estado (ver aparte), de que caiga el “alerta roja” que pesa para algunos de los sospechosos de ser responsables ideológicos del atentado a la sede judía de la Amia ocurrido en 1994 en Buenos Aires.
“El 27 de julio salió una nota en el Wall Street Journal en la cual se hace referencia a que en el acuerdo nuclear que firmaran Estados Unidos junto a Gran Bretaña, Francia, Rusia y China, es decir los cinco miembros del Consejo de Seguridad de la ONU, más Alemania, se habría eliminado la clave roja para Ahmad Vahidi, ex ministro de Defensa de Irán –a quien ya no llaman el terrorista Ahmad Vahidi–, sino que ahora lo llaman el general retirado Ahmad Vahidi, de Irán, que por entonces se la llamaba la República Islámica de Irán, ahora se la llama Irán, ya no se lo llama el Estado terrorista de Irán, como se lo llamaba en aquel momento”, dijo Aníbal.
En su relato, el funcionario remarcó: “Esta visión que Estados Unidos asume nos pone en el centro de la escena de una discusión ridícula que tuvimos en la Argentina durante mucho tiempo en la cual se pretendió hacer entender que las decisiones de la presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, dando origen a un acto federal complejo como fue el memorandum de entendimiento, en el cual el Ejecutivo lo firma, pero lo aprobó el Congreso de la Nación y después fue elevado a Naciones Unidas (ONU) para su reconocimiento por los dos países, después de haber sido aprobado por los respectivos parlamentos, esto se les volvió encima y les escupió la cara”.
Fernández apuntó contra la oposición política y de ciertos medios de prensa que defendieron la denuncia de Nisman contra la jefa del Estado: “Y entonces todo lo dicho en la Argentina, agraviando a la presidenta de la Nación, más la denuncia bochornosa del doctor Nisman, la bochornosa también actuación de la Justicia argentina… hasta que la denuncia, esa denuncia de Nisman llegara al tacho de la basura, como correspondía que debía terminar porque no podía terminar en otro lugar”.
Finalmente, insistió: “Esa salida de las claves rojas nos muestra en una situación peor que a la que habían puesto a nuestra presidenta. Entonces vuelvo a lo mismo: estos grandes doctores y fiscales que son los jinetes del apocalipsis, como Moldes, como Pollicita, o como Sáenz, ¿van a presentar hoy la denuncia penal contra el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, por encubrimiento? Quién lo sabe”.