Un grupo de mujeres que lleva adelante el Servicio del Voluntariado del Hospital Roque Sáenz Peña –donde no sólo tratan de ayudar con las carencias de las personas y las infancias que les toca estar internadas sino también aportan su tiempo para acompañar–, a principios de este año tomaron la iniciativa de comprar elementos de higiene para los pacientes. Para buscar los más baratos contactaron a Precios Rosario, la cuenta creada en Twitter e Instagram por el matrimonio de Melina y Santiago Zamboni, que se especializa en acercar precios reales a la ciudadanía y hacen publicidad a comercios.
A través de esta simple consulta, la comunidad reaccionó y la transformó en otra «cadena de favores», a la que se sumaron las hermanas de Ivana Garcilazo, la mujer asesinada de un piedrazo en la esquina de Ovidio Lagos y Montevideo. Silvina y Laura activaron una colecta solidaria de desodorantes el 30 de enero, en el Mercado del Patio. La movida sirvió para recibir donaciones y también para que se conozca un poco más la labor de esas mujeres que intentan aliviar cada día la situación de las personas a las que les toca pasar por el hospital de Laprida 5381.
Susana Martínez es la jefa del Voluntariado del Roque y en diálogo con El Ciudadano explicó que el grupo comenzó en octubre de 2022, por iniciativa de la jefa del Voluntariado del Hospital de Niños Víctor J. Vilela, Cecilia Fornaglia.
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«Empezamos hace un año siendo 11 y hoy somos 28 mujeres, las que llevamos adelante esta tarea con responsabilidad y compromiso. Cuando tomo las entrevistas es lo que pido y si lo tenés sos bienvenida, porque si no podés sostener el venir es un problema para nosotras. Nosotras no cobramos, hay muy pocas que están jubiladas y la mayoría tenemos un trabajo paralelo», resaltó Susana para dar un enfoque sobre la seriedad con la que se toman su labor.
Además, señaló que una de las cosas que se propuso cuando le dijeron que iba a estar al frente de esta iniciativa fue no hacer asistencialismo. «Lo nuestro consiste en poder proveerles las cosas que necesitan, pero también prestarles un oído, una palabra o algo tan simple como poder tenerle a su bebé para que la mamá se pueda ir a bañar. Tan básico como eso, es poder acompañar mientras dure su estadía en el hospital«, resumió.
Susana contó que están en todas las áreas: en la guardia pediátrica, donde llevan juguetes, pinturitas y mandalas. En la de maternidad, de adultos y de clínica, ofrecen elementos de higiene, ropa, leen libros, pintan las uñas, hacen talleres de lectoescritura, juegan a las cartas y hacen bingos o simplemente se sientan para escuchar lo que tengan que decir.
Falta una que es la más especial, donde están las mamás y sus bebés. «Cuando salen de neo, pasan a esa sala porque necesitan seguir siendo monitoreados un tiempo más. Tratamos de ayudarlas en lo inmediato, algunas veces es con ropa para ambos, porque las madres pueden llegar a pasar de uno a tres meses acá y no tienen la posibilidad de ir a su casa, porque viven lejos o no tienen los medios económicos. Entonces ellas nos piden algo de ropa mientras se lavan la que tienen», contó.
Susana dio la entrevista sentada en el único escritorio que tiene la modesta salita donde funciona el Voluntariado. En ese lugar, que está al lado de la farmacia y casi al fondo del edificio del Roque, hay estantes y un casillero en los que las voluntarias aprovechan cada centímetro para apilar cajas con la clasificación de las donaciones. Y en esa oficina las voluntarias se ponen sus chaquetas rosas de lunes a viernes. Arrancan a las 9 para pasar por las salas y así inventariar las necesidades inmediatas hasta el mediodía. A partir de las 14 el ritmo disminuye y, hasta las 17, las mujeres organizan los talleres.
Para la jefa del voluntariado uno de los desafíos más grandes es adelantarse a las demandas para poder responder en tiempo y forma. «Tenemos que proyectar a largo plazo y de ahí surge la idea, porque, con la llegada del verano, una de las cosas que necesitábamos eran desodorantes. La subjefa Verónica Ciolfi consultó precios con la gente de Precios Rosario y así surge toda esta campaña. Melina lo publica en las redes y ahí se suman las hermanas Silvina y Laura, de Justicia por Ivana, y a raíz de esta publicación muchísima gente se acercó al Mercado del Patio», describió Susana.
La comunidad de Precios Rosario
La cuenta Precios Rosario fue creada en Twitter en 2019 por Santiago Zamboni, quien tenía la necesidad de tener un precio referencial y no sólo los porcentajes que veía en los medios de comunicación. El espacio creció rápidamente y cuenta con la interacción diaria de casi 40.000 seguidores, entre usuarios comunes y comercios. Luego anexaron Instagram, donde su esposa Melina está a cargo, y se enfocaron en el valor agregado de cada negocio, como el uso del producto o experiencias de consumo.
Cada red tiene demandas diferentes, pero Melina remarca que siguen siendo fiel a la esencia que lograron construir en estos cinco años, ser un espacio colaborativo. Para darles difusión, los comercios que pautan tiene la condición de darles precios para mostrar mientras que por el otro satisface inquietudes de sus seguidores sobre los diferentes precios que existen de los productos más diversos. “No hablamos de otro tema que no sea algo que beneficie a la gente y las personas constantemente nos dan temas de los que hablar, esos no tienen pauta publicitaria, pero sí un valor comunitario que para nosotros vale el doble”, explicó.
Fue en medio de todo ese universo de índices y propuestas que el 11 de enero pasado les llegó a su cuenta de Instagram el mensaje de Verónica, la subjefa del Voluntariado del Roque Sáenz Peña.
«Nos pedía un índice para encontrar el precio más económico de desodorantes porque quería hacer una compra entre las voluntarias para tener elementos de higiene para donar al hospital. Me pareció una idea bárbara para que la comunidad de Precios Rosario pueda colaborar. Tiramos una burbuja de preguntas y entre todos pudimos, en una hora y media, juntar un índice con muchos precios, entre ellos encontramos uno barato», recordó Melina para aclarar que lo interesante sucedió al otro día.
«Entraron una gran cantidad de mensajes que nos decían: ¿Cómo puede ser que lo tengan que poner ellas? Decinos dónde podemos donar, alguna manera en que podamos ayudar. ¿Tiene alguna cuenta bancaria? No nos queremos quedar con sólo pasarle un dato sería injusto que ellas los tengan que comprar», dijo.
Melina explicó que con sus seguidores decidieron generar un nuevo comunicado para invitar a quienes quieran hacer algo, propusieran alguna idea. «Ahí ocurrió la parte más linda, apareció Silvina Garcilazo que desde su Instagram @justiciaxivana se ofreció a hacer una colecta y arrancó el proyecto que se llevó a cabo el 30 de enero en el Mercado del Patio. Esa gran donación para el hospital fue la manera en que arrancó esta cadena de favores», resumió Melina para agregar que ese día se sumó el supermercado Saturno a la colecta y luego otras empresas que hicieron llegar los productos de higiene a las voluntarias de manera anónima.
El legado de Ivana
Ivana Garcilazo tenía 32 años cuando la tarde del 30 de septiembre pasado volvía a su casa en moto tras ver el clásico rosarino que se disputó en el Gigante de Arroyito. La hincha de Rosario Central estaba acompañada por su novio cuando fue asesinada de un piedrazo en el semáforo de Ovidio Lagos y Montevideo. Por el homicidio, un profesor de educación física y otro hombre están detenidos mientras la Justicia busca al tercer involucrado, el profesor de química Damián Reifenstuel. El trío fue identificado por las cámaras de seguridad, tienen más de 40 años y son hinchas de Newell´s.
Silvina y Laura son las hermanas de Ivana que luchan cada día junto a su familia para encontrar justicia. «Que el dolor se transforme en amor y solidaridad como eras vos», es el lema que levantan en alto cada 30, al conmemorarse un nuevo mes del crimen, y que es el motor de los pedidos de justicia a través de colectas para distintas organizaciones de Rosario.
Este 30 de enero se cumplieron cuatro meses, hicieron la ya tradicional campaña y renovaron sus exigencias por celeridad a las autoridades para que atrapen a Reifenstuel, quien tiene captura a nivel nacional y con alerta roja de Interpol.
La manifestación empezó a las 17 con la colecta para juntar elementos de higiene y a las hermanas de Ivana las acompañaron las Voluntarias del Roque con sus distintivas chaquetas rosas junto a Melina de Precios Rosario. Estuvieron en el Mercado del Patio, en la arbolada que está cerca de la esquina de Córdoba y Crespo .
Silvina y Laura remarcan en cada convocatoria que llevan adelante estas iniciativas porque quieren que a Ivana se la recuerde desde su esencia de joven solidaria, siempre dispuesta a dar una mano a quien la necesitara.
Susana sigue conmovida por lo que generó la consulta de Verónica a Precios Rosario y reflexionó que formaron una relación con Melina que le da la sensación que va a dar para mucho más en el tiempo. «Es una red que nos permitió que se unieran las hermanas de Ivana. Esto nos pareció algo sumamente grandioso», concluyó.
Donaciones
Para quienes estén interesados en hacer algún aporte para el Servicio del Voluntariado del Roque Sáenz Peña pueden acercarse de lunes a viernes de 9 a 12 y de 14 a 17 a la sala que está dentro del hospital de Laprida 5381, casi en la esquina con avenida Nuestra Señora del Rosario. También se pueden comunicar al teléfono: 0341-4809144 interno 235.
Las voluntarias remarcaron que cualquier donación es más que bienvenida y describieron que necesitan, además de elementos de higiene personal: juguetes, lápices de colores, libros, cuentos, toallas y ropa (interior, de adulto y de bebé).
