La reforma jubilatoria ya es ley y el rechazo de un amplio sector de los concejales rosarinos no se hizo esperar.
Desde el interbloque del Frente Progresista lamentaron “que el Congreso de la Nación haya aprobado la reforma previsional tal como pretendía el gobierno nacional, que no es otra cosa que un brutal ajuste sobre los haberes de nuestros abuelos. Una vez más la solución al déficit fiscal lo terminan pagando los sectores más desprotegidos: los jubilados y los beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo”.
Y al mismo tiempo remarcaron “que no es del sistema previsional de donde tienen que salir los fondos para cubrir el rojo fiscal. Este gobierno nacional desde que llegó al poder no hizo más que desregular o liberar de cargas impositivas a los sectores más concentrados de la economía. Poner la lupa en el empleo no registrado también es una opción antes que ajustar directamente las jubilaciones”.
El interbloque Nacional y Popular expresó su preocupación ante la sanción de la ley en el Congreso de la Nación de la reforma previsional por considerarlo «un ajuste encubierto que afectará los derechos e ingresos de más de 17 millones de personas».
En el mismo sentido denunciaron que «la sanción de esta reforma afecta a trabajadores, formales, informales o desocupados, jubilados, otros próximos a jubilarse, jefas de familia que perciben la Asignación Universal por Hijo, ex combatientes de Malvinas y beneficiarios de diversas pensiones. Una reforma que instalaron a través de la represión, la mentira permanente sobre políticas inclusivas históricas en nuestro país y una invisibilización plena por parte de los medios aliados al gobierno nacional de la gran manifestación que se dio en el Congreso así como de los cacerolazos posteriores».