Anahí Garnica, una de las víctimas fatales del incendio en el depósito de archivos situado en el barrio porteño de Barracas, había cumplido el sueño de seguir los pasos de su padre al transformarse en la primera mujer bombero de la Policía Federal y aseguraba que lo que más le gustaba era “salvar vidas”.
“Me gusta salir a incendios, ayudar a la gente, salvar sus vidas, sus objetos, sus mascotas”, había señalado la joven en una entrevista a Página 12 del 17 de marzo de 2013.
Garnica terminó el colegio industrial donde cursó su secundaria y se recibió de maestra mayor de obras. Se inscribió en la Universidad Tecnológica Nacional para estudiar Ingeniería Civil, aunque en 2003 la Policía Federal decidió abrir sus puertas a las mujeres a modo de prueba.
En aquella oportunidad, ingresaron ella y otras cuatro mujeres en un curso que compartían con veinte varones. “No estaban seguros de que hubiera mujeres pero querían probar”, contó Garnica, en la nota que le concedió al matutino porteño.
En 2006 Garnica fue asignada al Cuartel 1º y se convirtió en la primera bombera en un cuartel en la Federal. “No había ni habitación ni baño para femeninos. Me designaron a la habitación de alarma, donde las mujeres atienden el teléfono. Ahí dormía los días de guardia. Al año siguiente me hicieron una habitación para dormir durante las noches de guardia”, recordó la joven subinspectora en la entrevista.
Garnica, de 28 años, madre de una pequeña beba, estaba casada con un bombero del Cuartel de La Boca.
Por su parte, Raúl Garnica, el padre de Anahí, se lamentó por la pérdida de su hija y señaló: “Era una apasionada y siempre fue muy profesional. Ésta es una pérdida muy dolorosa”. “Anahí era una hija extraordinaria. Como padre sólo puedo desear que haya sido muy feliz mientras estuvo con nosotros”, indicó.
En medio de su dolor, el hombre expresó: “Lo que sucedió no se puede arreglar. La nuestra es una profesión muy difícil”. “Yo tuve suerte de no caer durante mi carrera. De lo que sucedió hoy (por ayer), sólo sé lo que tengo que saber”, dijo.
También manifestó: “Hoy sólo puedo ocuparme de contener a mi gente y a mi familia ante esta dolorosa pérdida”.