El Juego del Momo, pruebas extremas, adolescentes, mensajes y muerte se engloban en ciertos retos que se pusieron de moda y que tienen desenlaces fatales. En Ingeniero Maschwitz, en el partido bonaerense de Escobar, una niña de 12 años falleció al colgarse de un árbol en el fondo de su humilde vivienda. Investigan si su muerte formaba parte de una «prueba extrema» presentada por el juego de origen japonés.
El Defensor del Pueblo Adjunto de la provincia de Buenos Aires, Walter Martello, alertó sobre la peligrosidad que implica dicho juego y afirmó que «es necesario que la prevención del suicido adolescente sea una política de Estado».
Según las últimas estadísticas oficiales, en territorio bonaerense durante 2016 se registraron 260 suicidios de jóvenes de entre 15 y 24 años.
Esta cantidad duplica a los que mueren por tumores dentro de esa franja etaria. En tanto, a nivel nacional, los suicidios es la segunda causa de muerte de jóvenes, después de los siniestros viales.
«En la provincia de Buenos Aires, se suicidan tres personas por día. El 20 por ciento corresponde a chicos de entre 15 y 24 años, mientras que el 19 por ciento tiene entre 25 y 34 años. Y el 40 por ciento de las personas suicidas en la Provincia tiene menos de 34 años», se indicó.
Desde el Observatorio de Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes (NNyA), que preside Martello, se viene advirtiendo por el impacto que está teniendo el suicidio juvenil en distintas localidades bonaerenses, por lo cual en los últimos meses el Defensor del Pueblo Adjunto ha mantenido reuniones con referentes políticos e institucionales de diferentes comunas.
Tras el caso de Selene que se ahorcó en un árbol del fondo de su casa en la localidad de Ingeniero Maschwitz y que podría estar vinculado a la propagación en las redes social del llamado «Juego del Momo», Martello alertó por la peligrosidad que implica y pidió que se aceleren los mecanismos para la plena aplicación de la Ley nacional y provincial que, entre otros puntos, establecen la puesta en marcha de un programa integral de prevención y asistencia.
La normativa bonaerense fue promulgada en enero de este año, pero su implementación sigue demorada, publica el Diario Popular.
«Vemos con preocupación lo que está ocurriendo con esta versión renovada de la Ballena Azul. Evidentemente, el Estado está corriendo de atrás y resulta urgente que se pongan en marcha los distintos dispositivos institucionales que fueron creados por ley para la prevención y asistencia, que aún no han sido instrumentados», enfatizó.
La ley establece que debe ponerse en marcha una línea telefónica que funcione las 24 horas para la atención de emergencias y situaciones críticas vinculadas a intentos de suicidio.
En la actualidad, solamente funciona la línea 135, que abarca la región metropolitana, pero no lo hace como corresponde, durante todo el día.
El marco legal vigente también dispone que se debe elaborar un protocolo de atención del paciente con riesgo suicida o con intento de suicidio.
Distintos profesionales que desempeñan funciones en el sistema de Salud, Seguridad y servicios locales de Niñez y Adolescencia confirmaron a la Defensoría del Pueblo bonaerense que no cuentan con una guía de acción y nunca recibieron capacitación sobre esta problemática.