El secretario general de la UOM nacional, Antonio Caló, pasó ayer por Rosario para brindar apoyo a la lista de precandidatos a diputados nacionales del Frente Justicialista que encabeza la ex jueza Alejandra Rodenas y lleva en tercer lugar al líder local de los metalúrgicos, Antonio Donello. El gremialista consideró que las próximas elecciones legislativas son fundamentales para frenar una reforma laboral similar a la aprobada en Brasil, aunque reconoció que el sindicalismo se sentará en la mesa a discutir cambios porque reconoció que “algunas modificaciones hay que hacer”.
“Si la reforma laboral no es negociada por todos los actores (legisladores, empresarios y sindicatos) va a ser muy difícil que se imponga. Una reforma como la de Brasil sería rechazada de plano y si los dirigentes sindicales la aceptamos, los trabajadores nos echarían a patadas”, explicó el ex secretario general de la CGT nacional en la sede local de la UOM, donde se realizó el acto del que también participaron Rodenas y Donello.
El referente metalúrgico no dejó dudas acerca de su preferencia en las legislativas de este año, donde, si el gobierno obtiene la mayoría en el Congreso, no tendrá problemas en aprobar la reforma laboral a su antojo; más allá de la resistencia que pueda ofrecer el movimiento obrero. “Quiero que gane el peronismo porque si amplía su cantidad de diputados y senadores podrá discutir la reforma laboral”, expresó Caló.
Apoyo a la CGT
Caló se mostró conforme con el accionar de la CGT conducida por Héctor Daer, Juan Carlos Schmid y Carlos Acuña, pese a las acusaciones de liviandad ante las políticas del presidente Mauricio Macri. “La CGT no puede reaccionar al ritmo de lo que dicen los medios porque tiene una responsabilidad y debe acompañar la gobernabilidad”, indicó el gremialista. Y remarcó que la central obrera “se viene comportando como la sociedad pedía, con diálogo con el gobierno y sabiendo que si ese diálogo fracasa la única manera de que Macri escuche es con un paro”.
Por otra parte, anunció que la CGT sacará hoy un documento donde va a convocar a una marcha, pero no habló de paro. “Le dimos tiempo al gobierno, pero ya pasaron casi dos años y no se ven mejoras. El tiempo se acabó”, lanzó Caló.
Para evitar medidas de fuerza, el gremialista consideró que el gobierno “tiene que cambiar su política económica”. “Para nosotros la confrontación es el único recurso, pero cuando fracasa el diálogo lo único que quedan son los paros. Esperemos que el gobierno y los empresarios entiendan que tienen que pensar más en los derechos de los trabajadores”, indicó el sindicalista metalúrgico,
En caída libre
El ex titular de la CGT contó que desde 2015 el gremio metalúrgico perdió 30 mil puestos de trabajo. “Nuestro gremio es el más afectado siempre que hay una crisis y eso repercute en otros sectores de la economía”, indicó Caló. Y agregó: “A nosotros lo que nos mata son las importaciones. Yo lo escucho al presidente cuando habla de abrirnos al mundo pero lamentablemente no podemos venderle nada a nadie y a nosotros nos invaden”.