El Consejo de la Magistratura bonaerense decidió apartar ayer al juez Benjamín Sal Llargués tras la polémica por el fallo que redujo la pena a un hombre condenado por abusar sexualmente de un niño de seis años, aludiendo que el menor ya había sido violado y “tiene una tendencia homosexual”.
El apartamiento de Sal Llargués de su cargo se adoptó a partir de que se hiciera conocido el fallo, firmado junto con el juez de Casación Penal Horacio Piombo, en el cual le redujeron la pena a un abusador sexual argumentando que el hecho no fue “gravemente ultrajante” porque la víctima ya había sido violada, y también porque consideraron que el niño “tiene una tendencia homosexual”.
El juez Sal Llargués se desempeñaba desde hacía varios años en el Consejo de la Magistratura de la provincia de Buenos Aires cubriendo un cargo administrativo en el que se confeccionan y corrigen los exámenes para los aspirantes que quieran formar parte del Poder Judicial bonaerense.
En tanto, el Departamento de Derecho de la Universidad Nacional del Sur (UNS), de Bahía Blanca, dio de baja Sal Llargués, quien se desempeñaba como profesor invitado de la Especialización en Derecho Penal.
Desde la UNS indicaron a la agencia Télam que en el marco de su resolución el Departamento de Derechos sostuvo que “resulta preocupante que magistrados, que a su vez son profesores universitarios, interpreten la conducta de un niño víctima de un abuso sexual como una elección libre acerca de su sexualidad y, asimismo, evalúen la aplicación de los agravantes y atenuantes del tipo penal de acuerdo con una supuesta orientación sexual de la víctima menor de edad”.
Por su parte, la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de La Plata fue tomada ayer por estudiantes y organizaciones de Derechos Humanos que reclamaban la expulsión del docente y juez Piombo, el otro firmante del polémico fallo. Los manifestantes exigieron que no dicte más clases en la institución y sea sometido a un juicio académico.
Ante el compromiso de las autoridades, la toma fue levantada por la tarde.
El martes pasado, la Universidad Nacional de Mar del Plata le revocó a Piombo el contrato que tenía como docente en la Facultad de Derecho de esa ciudad.
Por otro lado, en medio de las numerosas peticiones para que se evalúe la conducta de los jueces, la Suprema Corte bonaerense avaló ayer un pedido de juicio político contra ambos magistrados.
Es por un fallo de 2011 en el que beneficiaron a un pastor religioso que abusó sexualmente de dos niñas y las dejó embarazadas. En ese entonces argumentaron que vivían en “comunidades en las que el nivel social acepta relaciones a edades muy bajas” y que además “poseían experiencia sexual”.
Liberan a violador condenado
En medio de la polémica generada por el fallo firmado por Piombo y Sal Llargués, la sala II de la Cámara de Apelaciones de Lomas de Zamora liberó ayer a un abusador de una menor que estaba condenado a 10 años de prisión.
La medida fue tomada por los jueces Marcelo Soukop, Pablo Little y Alejandro Rojas. Los magistrados hicieron lugar a un habeas corpus presentado por el abogado, Martín Beherán, defensor oficial de Darío Antonio Echegaray Benítez, condenado en primera instancia a 10 años de prisión por violar a su hijastra entre los 11 y 13 años.
El Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) Nº1 de Lomas de Zamora había condenado a Echegaray Benítez por el delito de “abuso sexual agravado por el vínculo y corrupción de menores”.
Al entender que existía “riesgo procesal” TOC Nº1 de Lomas de Zamora dispuso la detención de Etchegaray Benítez. Rápidamente, el abogado defensor interpuso un habeas corpus ante la Cámara de Apelaciones de Lomas, que dispuso la liberación del condenado.
Los jueces tomaron el criterio de la doble instancia, que requiere la decisión de dos tribunales para que una condena quede firme.