A través de un proyecto que el Ejecutivo envió a la Legislatura provincial, tendrá solución un conflicto habitacional en 27 de Febrero y Colombres, en barrio Santa Clara (en la zona sudoeste de la ciudad), que beneficiará a 24 familias. Con fuerza de ley, el Senado aprobó la expropiación del predio, donde tres años atrás se vivió una tensa situación ante la posibilidad de un desalojo judicial.
Tras la aprobación, el senador socialista por el departamento Rosario, Miguel Ángel Cappiello, celebró la decisión de la Cámara alta. “Es un proyecto que tiene que ver con la gente. Es la expropiación de un terreno donde viven varias familias que tenían voluntad de pago y era un conflicto que lleva mas de 20 años que ya tenía sentencia de desalojo”, dijo.
El ex ministro de Salud provincial refirió luego que los senadores se pusieron en contacto con el juez que entiende en la causa “porque los vecinos querían pagar por la compra del terreno, aunque les pedían una cifra absolutamente impagable para ellos y que no condecía con la realidad”.
La intervención estatal que derivó en la expropiación del terreno ocupado surgió de una iniciativa de la diputada Verónica Benas, del partido Participación, Ética y Solidaridad (Pares), con la intervención del Concejo Municipal y, finalmente, tuvo la aprobación del Senado.
“A partir de esta propuesta de los vecinos comenzamos a trabajar con ellos, junto con la diputada Verónica Benas (quien fue la que presentó el bosquejo de ley en Diputados), y logramos que el gobernador Miguel Lifschitz enviara el proyecto a la Cámara baja para que se tratara en sesiones extraordinarias, y que finalmente fue aprobado”, expresó.
Para Cappiello, el visto bueno de sus pares fue “una doble satisfacción”, ya que contó que él mismo había hablado con su par y jefe de bloque del Partido Justicialista, Armando Traferri, como también con José Baucero, legislador por el departamento San Javier, y “todos tomaron la decisión de votar aunque no conocieran este proyecto”.
“Por eso es una doble satisfacción, porque les resolvemos el hábitat digno a un montón de personas y porque el bloque mayoritario confió en mis palabras. A partir de ahora la Secretaría del Hábitat tiene que empezar a trabajar con los vecinos, tal como lo hicieron en barrio Cullen, de la zona noroeste, donde viven 365 familias (ver aparte), con un proyecto de las mismas características que fue votado en meses anteriores”, explicó el senador socialista.
Trabajo mancomunado
Cabe recordar que el proyecto enviado por el gobernador a Diputados se basó en una serie de propuestas de distintos niveles del Estado, una de ellas, en la ordenanza 9.644 aprobada por el Concejo Municipal que intentó brindar una solución a los vecinos e impedir un oficio de desalojo librado para desocupar el predio hace poco más de tres años, una decisión judicial que generó gran tensión entre las familias de la zona.
Justamente, Cappiello se refirió al litigio judicial y consideró que “los desalojos no deberían dar lugar a que haya personas que se queden sin viviendas o expuestas a violaciones de otros derechos humanos”, cita que forma parte del proyecto aprobado recientemente por el Senado.
Junto con el Ejecutivo local, se llevó adelante un trabajo de relevamiento en el lugar, y hace aproximadamente dos semanas agentes municipales de la Secretaría de Desarrollo Social detectaron que parte de una franja de los habitantes del predio ocupado eran personas en situación de riesgo, ya que de acuerdo a los resultados obtenidos constataron que entre las familias afectadas había más de una treintena de menores, embarazadas y enfermos de HIV.
Un barrio en lucha
El barrio Santa Clara está ubicado en dos franjas comprendidas entre la colectora de avenida Circunvalación 25 de Mayo, avenida 27 de Febrero y Colombres. Desde hace 25 años, más de una veintena de familias habitan cuatro terrenos privados, sobre los cuales hasta hora pesaba una orden de desalojo.
El asentamiento no es improvisado y tiene raíces que se traducen en casas de material y servicio de agua potable a través del sistema de canilla comunitaria. Si bien hay tendidos de luz, los vecinos se encuentran en tratativas con la Empresa Provincial de la Energía (EPE) para colocar los medidores e ingresar en blanco bajo el marco de la tarifa social.
Antecedente: barrio cullen
En diciembre del año pasado, el gobierno provincial envió un proyecto a la Legislatura para la expropiación de 12 hectáreas ubicadas en barrio Empalme Graneros, en la zona noroeste de la ciudad, lindantes con el arroyo Ludueña y en donde hace más de 30 años viven allí unas 3.000 personas. Si bien pesaba una orden de desalojo de vieja data, oportunamente el secretario del Hábitat, Diego Leone, dijo a El Ciudadano que habiendo tanta gente de por medio, un desalojo en esas condiciones era prácticamente “inviable”.
El predio en cuestión ocupa parcelas sobre Sorrento hacia el sur, Cullen al oeste, Campbell al este y en la parte norte, la barranca del curso de agua. En 1984, cuando los primeros residentes ya habitaban allí, la empresa privada Compañía Santafesina de Tierras adquirió el suelo y más de una década atrás, cuando las obras de contención de inundaciones del Ludueña avanzaban, comenzó a reclamar judicialmente los terrenos, obteniendo una sentencia firme de desalojo que no se concretó.