Desde el jueves, la Argentina se garantizará un aporte más de unos 500 millones de dólares desde China, que irán a completar los 2.700 millones que el Estado asiático ya giró al país. La nueva liberación de fondos, que irán directamente a las reservas del Banco Central y tendrán disponibilidad de ser utilizados al menos hasta enero del próximo año, se concretará una vez que Cristina de Kirchner firme ese día el acuerdo complementario por la construcción de las represas Néstor Kirchner-Jorge Cepernic, para las cuales China aportará un total de aproximadamente 4.720 millones de dólares por toda la obra. Este acuerdo, cruzado con el “swap” entre los bancos centrales de los dos países firmado en julio pasado, le asegura al gobierno argentino la disponibilidad de aportes desde China por no menos de 5.000 millones de dólares, los que recién deben ser aplicados en el primer trimestre del próximo año, cuando las obras en la provincia de Santa Cruz comiencen a avanzar.
Hasta fin de enero pasado, China ya había girado unos 2.700 millones de dólares, mientras que el viernes se le anunció al país que ya estaban disponibles otros 262 millones, que se incrementarán desde este jueves hasta alcanzar los 500 millones. El gobierno puede disponer de ese dinero hasta tanto no deba ser aplicado directamente a las obras, lo que se demorará no menos de 12 meses, hasta que el proyecto Kirchner-Cepernic esté ya en plena marcha. Mientras tanto, el Banco Central de Alejandro Vanoli puede disponer del dinero como parte de las reservas. Por otra parte, la operación se realiza a través del banco central de Hong Kong, como mecanismo seguro para evitar eventuales avances de los fondos buitre.
El cierre de esta operación será el punto financiero más importante de la visita que desde ayer realiza Cristina de Kirchner a China. En Pekín, se encontrará con su par, Xi Jinping, empresarios y funcionarios en un intento por conseguir nuevas inyecciones de dólares vía inversiones y profundizar la “alianza estratégica integral”. Las actividades comenzaron ayer y durarán hasta el jueves, e incluirán además reuniones con el primer ministro, Li Keqiang. La presidenta indicó vía Twitter que hoy mantendrá “reuniones con CEO de empresas chinas con inversiones e interés en invertir dinero” en la Argentina. También señaló que llevará a cabo dos audiencias: “Una con el presidente de China Energy Engineering Company Group Limited, empresa matriz de China Gezhouba, su vicepresidente y el presidente y (con el) vicepresidente de China Gezhouba International, y otra con el presidente de la empresa Atanor SCA y con el presidente de la empresa Huapont-Nutrichem Company Limited”.
La jefa del Estado clausurará mañana el Foro Empresarial Argentino-Chino y luego se trasladará al Gran Palacio del Pueblo, para encontrarse con el presidente Xi Jinping.
“Ambos realizaremos, con funcionarios de nuestros países, reunión de trabajo y posteriormente firma de acuerdos. Más tarde, comida ofrecida por el presidente de la República Popular China en nuestro honor: el de Argentina”, precisó. La mandataria anunció: “El postre es a las 21, y es la videoconferencia con El Calafate. Sí! También videoconferencia desde China!”. Según lo publicado, el jueves, tendrá un encuentro con el primer ministro Li Keqiang y, luego, con el presidente del Comité Permanente de la Asamblea Nacional Popular, D. Zhang Dejiang.
Cristina Kirchner emprendió el viaje junto con una comitiva integrada por el canciller Héctor Timerman; el ministro de Agricultura, Carlos Casamiquela; el gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri; la diputada Julia Perié; el intendente de San Antonio de Areco, Francisco Durañona; y el presidente del Banco Nación, Juan Ignacio Forlón.
El acuerdo bilateral con China por la construcción de las represas Kirchner-Cepernic y el “swap” financiero se firmó en julio pasado y habilitó al país a solicitar al Banco Central de China desembolsos por hasta 70.000 millones de yuanes y depositar el equivalente en pesos, con un plazo de reintegro de hasta 12 meses. De ese dinero, Argentina ya solicitó unos 1.300 millones de dólares, que deberán desembolsarse antes de octubre del próximo año. Sin embargo, como ya está cerrado además el giro de unos 3.000 millones de dólares primarios por el inicio de las obras de las represas, el país no deberá realizar desembolsos. El primer pago efectivo será recién entre febrero y marzo del año próximo, cuando ya haya otro gobierno en la Casa Rosada.
