Argentina, con las bajas significativas de Lionel Messi ySergio Agüero, se medirá hoy con Brasil, potenciado con el regreso de su estrella Naymar, en una nueva versión del clásico más importante del fútbol sudamericano, válido por la tercera fecha de las Eliminatorias rumbo a Rusia 2018, que debía jugarse ayer, pero fue pospuesto 24 horas a raíz de la tormenta que afectó a Buenos Aires y anegó la cancha de River Plate.
El encuentro comenzará a partir de las 21 en el estadio Monumental de Nuñez, con el arbitraje del paraguayo Antonio Arias y la televisación de la TV Pública y la señal de cable TyC Sports.
Argentina afrontará el clásico sin Messi, el crack rosarino que resuelve casi todos los problemas ofensivos del equipo, y además, el entrenador Gerardo Tata Martino no tendrá al «Kun» Agüero, ni tampoco a Pablo Zabaleta, Ezequiel Garay, Javier Pastore ni un relevo de jerarquía como Carlos Tevez, eso modificará el esquema táctico y el formato 4-2-1-3 mutará en un 4-3-3, lo que obligará a Brasil a saltear la media cancha para que Neymar pueda ponerse mano a mano con los centrales argentinos.
En contrapartida, regresará el goleador Gonzalo Higuaín para ocupar el espacio de 9 y el Tata optó por sumar en el mediocampo a Ever Banega, con la intención de darle un poco de fútbol a la media cancha.
Claro que si se recurre a los orígenes de los tres volantes que dispondrá Martino, tanto Lucas Biglia como Javier Mascherano y Banega pueden conformar tranquilamente un «triple cinco» para contener más que para jugar, reflejando en la previa el «mal de ausencias» que sufre un equipo que además acumula algunos bajones individuales muy pronunciados, por caso Ángel Di María, según un cable de la agencia Télam.
Enfrente estará Brasil, con el regreso de Neymar tras purgar la sanción que sufrió por su expulsión en la Copa América de Chile hace poco maś de cuatro meses, y ese será quizá el principal foco de atención para los defensores argentinos.
Será entonces un partido entre dos seleccionados llenos de historia y vacíos de presente que, en lo inmediato, arrancaron con dificultades estas eliminatorias, ya que ambos empezaron perdiendo 2-0 (Argentina con Ecuador y Brasil con Chile) y luego los de Martino rescataron un 0-0 de Paraguay y los de Dunga vencieron por 3-1 a Venezuela.
