Los gobiernos de Argentina y Paraguay acordaron hoy la implementación de un programa conjunto de vigilancia epidemiológica y control de enfermedades transmisibles prevalentes que tendrá como prioridad la lucha contra el dengue.
El jefe de Gabinete de Ministros, Jorge Capitanich, y el ministro de Salud, Juan Manzur, se reunieron en la sede de la cartera sanitaria paraguaya con el ministro sanitario de ese país, Antonio Barrios, y el jefe de Gabinete Juan Carlos López Moreira.
El acuerdo rubricado por Manzur y Barrios propone «un programa operativo conjunto de salud en las áreas de frontera para el desarrollo de acciones conjuntas de vigilancia epidemiológica y control de enfermedades transmisibles prevalentes».
El acuerdo establece que «en esta instancia se dé prioridad al dengue, dada la situación epidemiológica regional y su implicancia para la salud pública en las áreas de frontera, propiciando mecanismos que faciliten la cooperación y colaboración entre las ciudades espejo para la vigilancia y control vectorial».
El acuerdo también postula «fortalecer los mecanismos de cooperación bilateral, para el abordaje de temas priorizados, como procedimientos de alta complejidad, transferencia tecnológica, capacitaciones y otras áreas consideradas de interés».
Al respecto, Capitanich dijo: «los que gobernamos alguna vez en zona de frontera sabemos que los límites territoriales no restringen la ayuda humanitaria, y por eso tenemos una larga historia de cooperación con la hermana República del Paraguay para trabajar juntos por la salud de nuestros pueblos».
«Este acuerdo va a ser clave para la vigilancia epidemiológica y el control de enfermedades transmisibles prevalentes, pero además hace falta que cada uno tome la responsabilidad que le toca en el combate de la enfermedad», agregó.
«No alcanza con las mejores políticas sanitarias si estas no se hacen carne en cada uno de nosotros, tenemos que descacharrar, sacarle los espacios domésticos al mosquito, y ante la duda hay que consultar al médico sin dudarlo, porque la detección temprana favorece el mejor control de la enfermedad y de los focos de contagio», explicó.
«Argentina ha dado grandes pasos en la reconstrucción de su sistema sanitario, como el plan Remediar, la incorporación de 10 vacunas al calendario obligatorio y los nuevos hospitales de alta complejidad en todas las provincias, pero además de eso hace falta el compromiso del pueblo», concluyó Capitancih.
En tanto, el ministro de Salud, Juan Manzur, dijo que «este acuerdo forma parte de un trabajo en conjunto que iniciaron los presidentes de nuestros dos países para mejorar el acceso a la salud de nuestros pueblos».
«En toda nuestra región se registran casos de dengue, y también se han registrado muertes por dengue, en un escenario en el que se ha detectado que circulan los cuatro serotipos del virus», advirtió.
El funcionario sostuvo que «Argentina no puede pensar en ocuparse por sí sola del problema, porque el dengue no sabe de fronteras, debemos articular las políticas sanitarias a nivel regional y en eso hay que destacar el trabajo que viene llevando adelante la hermana República de Paraguay».
«Esta cooperación binacional no se va a limitar al dengue, ya estamos pensando en replicar esta experiencia con el Chagas y avanzar en el control de medicamentos y en el trasplante de órganos», concluyó Manzur.
El ministro de Salud paraguayo, Antonio Barrios, dijo que «hace tiempo que paraguayos y argentinos trabajamos bajo el concepto de salud de frontera, que nos hermana en el trabajo sanitario».
«Estas enfermedades se combaten eficazmente en el marco de un abordaje regional, en el que los gobiernos compartimos estadísticas y tecnologías para trazar las estrategias necesarias», agregó.
Del acto que se desarrolló en el auditorio del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social de Paraguay participaron también el gobernador de Formosa, Gildo Insfrán, y el embajador paraguayo en la Argentina, Nicanor Duarte Frutos, entre otros funcionarios paraguayos y argentinos.