Una seccional policial de zona norte fue blanco de un atentado que resultó fallido la noche de este domingo. Ocurrió en la puerta de la subcomisaría 2ª, donde desconocidos dejaron una bomba molotov que no llegó a explotar. La arrojaron dos hombres desde una moto debajo de un patrullero que estaba fuera de uso.
El atentado se registró alrededor de las 21.30 frente a la seccional ubicada sobre calle Gazcón al 2900.
Voceros del caso informaron que el ataque fue detectado por los efectivos que se encontraban de guardia, quienes al salir observaron que el artefacto explosivo de fabricación casera arrojado quedó debajo de un móvil policial -fuera de servicio- que estaba estacionado en la puerta.
La molotov no llegó a estallar debido a que la mecha -que estaba quemada dentro de una botella con líquido inflamable- se habría apagado en el trayecto tras ser arrojada, según explicaron los voceros.
El caso es investigado por el fiscal de flagrancia de turno en Rosario, Pablo Socca.
Esta no es la primera vez que una seccional policial es blanco de un atentado de estas características, ya que el 25 de abril pasado la sede de la subcomisaría 24ª, ubicada en el barrio Empalme Graneros, fue atacada con una bomba molotov, lo que provocó un principio de incendio en un árbol y daños al automóvil de una empleada de la fuerza que estaba estacionado en la puerta.
El 5 de abril también arrojaron una molotov a la sede de la comisaría 15ª, ubicada entre las calles Sarmiento y Ameghino, de la zona sur y una camioneta de la fuerza que estaba estacionada en la vereda fue incendiada.
A raíz de amenazas recibidas en las seccionales policiales de Rosario, el Ministerio de Seguridad de Santa Fe comenzó en abril último a reforzar la seguridad y fueron provistas de vallas las subcomisarías 24ª, 12ª y 20ª.