El precandidato a concejal por la lista “Una ciudad para todos” Sebastián Artola se refirió a la situación de violencia que atraviesa la ciudad al afirmar que “Rosario vive su momento más crítico, estamos en el punto más alto del ciclo de violencia que sufre la ciudad desde hace diez años”.
“Veo una dirigencia sin iniciativa y capacidad de respuesta frente al drama diario que se vive”, sostuvo el dirigente social.
“El Estado llega tarde y mal a los problemas, o directamente no llega nunca. El sentimiento de desamparo de muchos vecinos y vecinas es total”, agregó.
“Hay que repensar el Estado municipal para que tenga otra capacidad de intervención y respuesta. Y hay que avanzar hacia un nuevo proyecto de ciudad que garantice por igual el acceso a servicios básicos, obras de infraestructura, transporte público y la protección de los derechos que todos tenemos”, sostuvo Artola.
“Con Javkin se profundizó el retiro del Estado municipal de los barrios. El resultado no podía ser otro que zonas de la ciudad libradas a su suerte en las que mandan las mafias y la narcocriminalidad”, señaló el referente local.
“Si el Estado no llega a los barrios es imposible bajar los niveles de violencia”, señaló. Y aclaró: “Cuando decimos que el Estado tiene que estar presente en los barrios, es una presencia permanente, no para una foto o una puesta en escena, urge un Estado con políticas públicas integrales, con acciones concretas y sostenidas en el tiempo, que apunten a la reconstrucción del tejido social y a la recuperación de lo público en el territorio”.
Por otra parte, Artola señaló la “falta de articulación entre los tres niveles del Estado”. Para el precandidato a concejal, “lo que pasa en Rosario necesita otro compromiso del gobierno provincial y nacional, más allá de que el intendente no se haga cargo de la parte que le toca y se dedique a patear la pelota para otro lado”.
“Para hacer frente a la realidad que se vive es imprescindible un abordaje conjunto entre municipio, provincia y Nación y los tres poderes del Estado”, concluyó.