Dos hombres vestidos como empleados del Correo Argentino entraron este miércoles por la tarde a una casa ubicada en Entre Ríos al 3400, en la zona sur de la ciudad. La entradera fue advertida por un taxista que ocasionalmente pasaba por el lugar al momento del hecho y llamó al 911. Personal del Comando detuvo a los ladrones pero una mujer que hacía de campana logró escapar.
Al tomar conocimiento de una posible entradera, este miércoles a las 16.30, personal del Comando se dirigió a la vivienda apuntada por el taxista y al tocar la puerta salió un hombre y le dijo: “Estoy esperando a mi papá que salga así nos vamos”.
Pero los policías escucharon gritos de auxilio desde el interior de la casa y detuvieron al hombre que simuló ser el hijo de la víctima y al otro asaltante que se encontraba en el lugar, para secuestrarles una pistola 9 milímetros y otra 3.80.
¡Carta!
Posteriormente, el dueño de la vivienda –de 69 años y quien fue hallado maniatado por los policías– relató a los agentes que momentos antes se habían presentado dos hombres en su domicilio, con indumentaria del Correo Argentino, diciéndole que tenían una encomienda en la que figuraban todos sus datos, y que al abrirles la puerta ingresaron a la casa por la fuerza, lesionándolo de un golpe, en la muñeca izquierda, producto del forcejeo.
Mientras se sucedían los hechos, una mujer se encontraba en las inmediaciones y al ver que se acercó la Policía se fue rápido del lugar. Las pesquisas barajaron la posibilidad de que se tratara de una cómplice de los ladrones.
Los implicados
Fuentes policiales indicaron que frente al domicilio se encontró un auto Volkswagen Golf color champagne en el que se desplazaban los imputados. En el interior del rodado se encontraron un portaobjetos, un bolso con teléfono, llaves y documentación de una mujer llamada Natalia R., quien se presume sería la tercera involucrada.
En tanto, los hombres detenidos fueron identificados como Gregorio L. de 28 años y Rodrigo D. de 30. Se dio cuenta de lo sucedido al fiscal de Flagrancia en turno, Carlos Covani.