Un joven de 19 años fue asesinado de cuatro disparos este miércoles por la tarde. Un desconocido lo atacó en la vereda de Martínez de Estrada al 7900, en barrio 7 de Septiembre.
Los pesquisas tiene como hipótesis más fuerte que el móvil del ataque fue la disputa del territorio para la venta de drogas al menudeo, zona que los investigadores de las fuerzas federales le adjudican a un ex barra de Rosario Central detenido en Coronda. Hace un mes y a una cuadra, acribillaron el frente de la vivienda del jefe del Comando Radioeléctrico de Granadero Baigorria.
Según informaron voceros del Ministerio Público de la Acusación (MPA), la víctima, identificada Rodrigo Alejandro Soraire, de 19, estaba tomando una gaseosa en la vereda de un comercio de Martínez de Estrada al 7900 cuando un desconocido bajó de un auto y sin decir nada, abrió fuego.
Rodrigo recibió cuatro impactos en tórax, cadera, rodilla y tobillo. Corrió casi media cuadra hasta que se desvaneció cerca de la esquina con Aguará. Vivía a sólo una cuadra de donde lo asesinaron.
Cuando los médicos del Sies llegaron al lugar, el chico había fallecido. En tanto, el homicida huyó en el mismo vehículo en el que había llegado, aportaron las fuentes.
El caso quedó a cargo del fiscal de la Unidad de Homicidios Patricio Saldutti, quien ordenó medidas al personal del Gabinete de Criminalística y de la División Homicidios de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) como el relevamiento de las cámaras en la zona y la toma de declaraciones para intentar identificar a los atacantes.
Además, el fiscal ordenó el trasladado del cuerpo al Instituto Médico Legal (IML) para la realización de la correspondiente autopsia.
En el lugar, los pesquisas hallaron cuatro vainas servidas calibre 9 milímetros y recuperaron dos plomos deformados del mismo calibre, describieron las fuentes policiales.
Entramado narco
Voceros relacionados al caso indicaron que los testimonios recolectados en el lugar dieron cuenta que la ejecución de Rodrigo estaba vinculada a disputas por el liderazgo del territorio para la venta de estupefacientes al menudeo. Los testigos, que pidieron reserva en su identidad por miedo a represalia, contaron que Rodrigo estaba relacionado con el hijo de un conocido de las crónicas policiales, el Toro, un ex barra de Rosario Central de 47 años que está detenido en el penal de Coronda.
Las fuentes agregaron que para esas personas, Rodrigo vendía para el hijo del barra preso.
En junio pasado, la celda en Coronda del Toro fue allanada en una causa por venta de estupefacientes que lleva adelante la fiscal federal, Adriana Saccone. En ese momento, los investigadores buscaban desbaratar a una banda que vendía drogas al menudeo en la zona noroeste.
A finales de 2016, el Toro fue denunciado junto a su padre por su hermana Marisa, quien los sindicó por regentear un punto de venta de drogas en el barrio 7 de Septiembre con complicidades de la subcomisaría 21ª bajo la fachada de un almacén familiar. La denuncia motivó varias balaceras y más denuncias cruzadas entre familiares, ya que el Toro dijo ser verdulero y que quien vendía drogas era Marisa.
En abril del año pasado, dos nuevas balaceras en frentes de viviendas del barrio derivaron en 14 allanamientos realizados en mayo por la Policía de Investigaciones (PDI) que secuestró armas, más de un kilo de cocaína y detuvo a cuatro personas, entre ellas al Toro, quien quedó alojado en Coronda.
La balacera al jefe del Comando de Baigorria
Hace un mes, el martes 14 de abril alrededor de las 21, las detonaciones ya se había hecho sentir en el barrio cuando desconocidos dispararon casi una veintena de veces contra el frente de una vivienda de la cuadra de Martínez de Estrada al 8000, la misma dirección donde vivía Rodrigo Soraire y a una cuadra de donde lo mataron este miércoles.
Ese día, los pesquisas corroboraron que el frente de una vivienda de la Tira 2 del Fonavi tenía cinco impactos de arma de fuego y recolectaron 17 vainas servidas calibre 9 milímetros en las inmediaciones.
La propietaria, de 39 años, contó a los uniformados que era la pareja del subjefe del Comando Radioeléctrico de Baigorria, Hernán D. y describió que producto del brutal ataque, casi una decena de proyectiles habían atravesado la ventana e ingresaron a la vivienda. Los pesquisas hicieron un relevamiento del lugar y constaron que en el interior había 9 impactos, uno de ellos se incrustó en el techo, detallaron los voceros relacionados al caso para remarcar que no hubo heridos, aunque no aportaron si los tirados se trasladaban en auto o motos.
El fiscal de la Unidad de Flagrancia en turno quedó a cargo de la pesquisa y ordenó medidas al personal del Gabinete de Criminalística de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) para determinar tanto la mecánica como para identificar a los autores de la balacera.
Las fuentes policiales indicaron que, a raíz de las declaraciones de las víctimas donde aseguraron que no tenían problemas con nadie, no descartaban que los tiradores hayan confundido el blanco con otra casa lindera, en la cual habitan allegados al asesinado ex líder de la barra de Newell´s, Pimpi Caminos.
