Un muchacho de 18 años fue asesinado anteanoche de un disparo en medio del pecho, en la zona noroeste. El chico fue atacado por un grupo de jóvenes que se acercaron al lugar a los tiros, y terminaron por herir al pibe. Si bien parala Policíael motivo del ataque fue una pelea previa entre la familia del muerto y la de los agresores, en el barrio dijeron que los asesinos abrieron fuego sólo para marcar territorio. Al cierre de esta edición no había detenidos por el crimen, aunque los investigadores seguían la pista de una familia de la zona.
Alrededor de una veintena de vecinos esperaban anteanoche en la esquina de Garzón al 100 bis a los médicos del Sies, para que asistieran a Rubén Darío Agüero, de 18 años, mientras agonizaba por un disparo en el tórax. “Lo sacamos de en medio de los ranchos y lo llevamos hasta una calle del otro lado de la vía, porque no se iban a querer meter en los pasillos, y de ese lado hay casas de material”, comentó un vecino del asentamiento que recorre las vías de la zona noroeste.
Los allegados a la víctima reconstruyeron que todo ocurrió a las 21 de anteanoche, cuando Agüero –que era conocido en el barrio como Chicharra– estaba con dos amigos sentados sobre unos troncos al frente de su casa, en Garzón y la vía, cuando aparecieron dos jóvenes armados y, sin mediar palabra, arremetieron a los tiros contra Chicharra y sus amigos. “Había roces con esta gente, pero nunca pasó a mayores. Vimos que dos se subían a la vía, sacaron pistolas9 milímetrosy empezaron a los tiros. Corrimos hasta la entrada de la casa del hermano de Rubén, que queda a unos pasos”, contó uno de los muchachos que se encontraba junto a la víctima fatal en el momento del ataque. “Chicharra estaba en el medio y cuando quisimos entrar quedó detrás. Ahí lo alcanzó el balazo”, agregó el pibe.
Según contó a El Ciudadano el hermano mayor de Rubén Agüero, en el momento del ataque él se estaba preparando para ir a las Colectividades. “Fui a hacer un mandado y cuando volví no encontré a nadie afuera”, contó el joven, quien dijo que eso le llamó la atención ya que momento antes, cuando había salido, su hermano y amigos estaban sentados en los troncos de la esquina. “Entré a mi casa y me encontré con mi hermano tirado al lado de la cama y había mucha sangre. Estaba inconciente. Los vecinos me ayudaron a llevarlo hasta la esquina, pero no pudieron hacer nada. Llegó muerto al Heca”, relató el mayor de los Agüero, quien agregó que no es la primera vez que pierde un hermano tras una lluvia de balas, ya que hace dos años fue asesinado Leandro Damián, de 14 años, de un tiro por la espalda, aseguró el muchacho.
Algunos vecinos de la zona deslizaron que los autores del ataque serían los miembros de una banda que ya cuenta con antecedentes por hechos de estas características en el barrio, y que son conocidos como Los Stuart. “Estos pibes siempre están armados, y tienen como costumbre andar a los tiros para dejar en claro que el lugar es de ellos”, contó una vecina. “Vinieron dos, balearon a los chicos y después pasaron los otros. Eran muchos, todos enfierrados para hacerse los chetos y mostrar que mandan en la zona. Van a caer muchos para estas fiestas, porque tienen la costumbre de andar a los tiros más cerca de fin de año. Siempre en diciembre hieren o matan a alguien”, comentó un hombre que también vive en la zona.
En tanto, los hermanos de Chicharra dijeron estar cansados de la situación que se vive en el barrio y aseguraron que después de velar a su hermano enla Iglesiade Barra y Arévalo van a mudarse. “Mi hermano tenía su ranchito acá adelante, no molestaba a nadie, a veces hacía sus cosas pero también trabajaba de albañil y se ganaba sus mangos. Queremos que agarren a los que lo mataron porque no es justo. Ahora tenemos miedo. Hay muchos chicos chiquitos y no queremos que maten a ningún otro”, reclamó el muchacho en la puerta de su precario hogar, que consta de dos pequeños ambientes, –uno de los cuales fue adonde cayó herido Rubén Agüero–, y un improvisado baño.
Según explicaron fuentes de la investigación, el autor del disparo está identificado por un apodo, al igual que dos de sus cómplices.
De acuerdo con los voceros, el plomo le ingresó a Chicharra por el brazo derecho y le quedó alojado en el tórax.
Sin embargo, para lo uniformados el ataque no fue por una cuestión territorial, sino por un ajuste de cuentas. “Lo que tenemos por el momento es que la víctima y sus amigos se pelearon previamente con dos jóvenes, quienes al ver que perdían se fueron para luego volver armados y atacaron a los tres pibes”, detallaron las fuentes.
Los pesquisas desestimaron la versión que involucra a Los Stuart. Es que, de acuerdo con los investigadores, esta banda, que está integrada por unos 20 menores y que durante 2010 se dedicaba a mejicanear a narcos y ladrones en la zona noroeste, está desbaratada debido a que la mayoría de sus integrantes fueron asesinados o cumplen condena.
El caso es investigado por el Juzgado de Instrucción de la 7ª Nominación, con la colaboración dela Brigadade Homicidios y el personal de la comisaría 12ª.
