El ministro de Justicia de la provincia, Ricardo Silberstein, en sintonía con las declaraciones de su par de Seguridad, Maximiliano Pullaro, responsabilizó al juez que autorizó el alojamiento de Ariel Tubi Segovia en un pabellón común de Coronda. Y sostuvo que el Procurador debe revisar si la conducta del magistrado merece una sanción tras el asesinato del detenido.
“Es una crónica de una situación anunciada y previsible”, sostuvo Silberstein. Y aseguró que es un tema que se trató en las reuniones que se llevaron adelante en el marco de la seguridad. Allí quedó asentada, agregó, la postura de que es el Servicio Penitenciario quien debe decidir en qué lugar se debe alojar a un detenido.
“Más que hablar del Poder Judicial, hay que hablar de algunos jueces. Es una locura que el preso elija dónde ir”, insistió Silberstein. Explicó sobre el tema que el delito cambió en los últimos años y que hay presos que eligen estar todos juntos, porque pertenecen a una misma organización criminal, lo que es un riesgo.
“Estos presos deben estar en lugares de seguridad”, afirmó el ministro. Y admitió que es un tema complicado porque cuando se establecen políticas de control hay motines y presentaciones de habeas corpus.
A la hora de evaluar responsabilidades, para Silberstein la culpa es sólo del juez. Recordó que la Corte Suprema de Justicia de la provincia ya sostuvo que es el Servicio Penitenciario quien debe decidir dónde debe alojarse a un preso. “Hay que pedirle al Procurador que evalúe la situación de este juez. Así como se sancionan a los policías y a los funcionarios, también hay que sancionar a los jueces”, remató el ministro.
