El remisero que trasladaba a María Caccone, la mujer asesinada cuando iba a un banco de la localidad bonaerense de San Justo a depositar dinero, y que había sido herido durante el hecho, fue detenido en las últimas horas bajo sospechas de haber actuado como entregador, por lo que será indagado en las próximas horas, informaron este lunes fuentes policiales.
La mujer fue ejecutada de un balazo por hombres que se trasladaban en moto durante un asalto. Y mientras la Policía busca a los asesinos de María de los Ángeles Caccone (39) los investigadores confirmaron que su compañero se quedó con 20 mil pesos del botín que se le cayeron a los ladrones. El hombre estuvo detenido y quedó liberado el viernes a la tarde. En tanto, se supo que la víctima tenía en su poder 120 mil pesos, 80 mil más de los que se informó en un primer momento.
El hecho ocurrió el jueves alrededor de las 14 en Australia y Arieta, en el centro comercial de San Justo, cuando al menos dos ladrones le cruzaron la moto al Uber en el que iba María junto a un compañero de trabajo, Marcos Fabián González (35), y el chofer del auto, Juan Marcelo Rearte (44). Los empleados del frigorífico llevaban plata para depositar en un banco.
Antes de llegar a la sucursal, una moto se cruzó en el camino del Logan. Uno de los asaltantes se bajó y quiso abrir la puerta del lado del acompañante, donde iba María. Como no pudo, rompió la ventana y comenzó a disparar. La mujer recibió un tiro en el cuello y le arrancaron la cartera de sus manos.
María murió en el lugar. El chofer del auto, que recibió un impacto de bala a la altura de la cintura, tuvo que ser internado. González resultó ileso.
Si bien una primera sospecha de los investigadores apuntaba a que el compañero de trabajo de la víctima podría haber sido cómplice de los ladrones, ahora creen que habría aprovechado la situación para guardarse 20 mil pesos que se le cayeron a los ladrones.
La Policía descubrió la situación cuando el hombre había sido trasladado al hospital para realizarse una revisión médica y los agentes notaron una actitud sospechosa. Entonces lo trasladaron a la comisaría, donde lo revisaron y le encontraron la plata.
“Unos 19.000 o 20.000 pesos son los que le secuestramos al compañero de trabajo que está detenido acusado de haberse aprovechado de la situación para esconder en su ropa interior el dinero que quedó en el auto tras el asalto, pero unos 100.000 son los que faltan y en apariencia se llevaron los atacantes”, dijo uno de los investigadores.
Según señalaron fuentes del caso, durante su indagatoria González aseguró que guardó el dinero para conservarlo. Tras declarar, fue liberado.
Mientras tanto, la investigación continúa para tratar de identificar a los sospechosos, que aún no fueron detenidos. Las imágenes de las cámaras de seguridad permitieron ver que además de los que cruzaron la moto, habría un tercer sospechoso. “Están filmados, los tenemos merodeando, media hora antes del asalto, la cuadra donde ocurrió todo”, dijo una fuente judicial.
En los videos se observa que a las 14.02 pasa caminando primero un hombre con bigote, bermudas claras, remera negra y gorra roja y negra; seguido de otro con jean, remera ajustada al cuerpo oscura con gorra roja y blanca y con bolso tipo bandolera negro y, por último, a un motociclista que circula sobre la vereda detrás de los otros dos sospechosos, con casco negro colocado, anteojos oscuros y chaleco inflable negro.
“Estamos seguros que esos son los autores materiales del robo. Estamos trabajando con las imágenes para identificarlos, localizarlos y detenerlos”, agregó un jefe policial.
En tanto, peritos de la Policía Científica encontraron un proyectil calibre 9 milímetros incrustado en el capot del auto Logan. Esa evidencia será preservada para un eventual cotejo balístico.