Un empleado de firma Cargill fue asesinado ayer por la tarde en el límite entre Alvear y Villa Gobernador Gálvez cuando el Renault Sandero en que se desplazaba fue atacado a balazos desde otro vehículo. Un compañero de trabajo que lo acompañaba terminó herido, mientras que dos niñas que también iban en el auto, hijas de este último, resultaron ilesas. En el lugar la fiscal a cargo del caso, Marisol Fabbro, dispuso las primeras medidas para intentar dar con los atacantes.
En principio, la pesquisa descartaba el móvil de robo y analizaba otras hipótesis, como una venganza por cuestiones aún desconocidas.
Según voceros policiales y judiciales, un Renault Sandero Stepway que circulaba por el llamado camino viejo a Cargill, que separa Alvear de Villa Gobernador Gálvez, fue atacado a tiros desde una camioneta, al parecer una Volkswagen Amarok, a las 17.30 de ayer y unos 30 metros antes de la ruta provincial 21.
De acuerdo con esta versión, la agresión se produjo justo donde hay un paso a nivel, donde el auto debió disminuir la velocidad. Tras el ataque, los tiradores escaparon mientras que quien viajaba como acompañante en el Renault Sandero, Ramón Gómez, de 30 años, murió en el lugar producto de una herida en el cuello; el conductor, identificado como Diego F., de 34, fue trasladado al Heca, donde se encontraba internado en grave estado debido a que un balazo le dio en el sector izquierdo del tórax.
En el auto viajaban dos nenas de 7 y 8 años, hijas de este último, quienes resultaron ilesas y fueron entregadas a sus familiares. Según comenzaron a reconstruir los investigadores, ambos hombres habían trabajado como cada día en la multinacional Cargill y tras concurrir a almorzar con un tercer compañero a Arroyo Seco, regresaron para que este último buscara su moto, que había quedado estacionada en la empresa. Cuando volvían desde la sede de la firma fueron atacados. Voceros judiciales dijeron que la fiscal Fabbro, de la Unidad Especial de Homicidios Dolosos, llegó al lugar del hecho minutos después de producido, y dispuso las primeras medidas, entre ellas la correspondiente autopsia, la búsqueda de posibles testigos y el relevamiento de las cámaras de videovigilancia que puedan existir en la zona.
Según voceros policiales, en la escena del crimen no fueron incautadas vainas servidas, por lo que se presume que la agresión se produjo con un revólver. La pesquisa judicial cuenta con el auxilio de la Policía de Investigaciones y de la Unidad Regional II, a través del Comando Radioeléctrico y la subcomisaría 8ª de Alvear, cuyo personal trabajó en la zona.