Antes de finalizar el año calenadario, Central tendrá que disputar seis partidos de esta Superliga. Allí habrá en juego 18 de los 72 puntos que restan para definir, en la tabla de los promedios, cuáles serán los tres equipos que dejarán la primera división. Y también estará en juego la continuidad del cuerpo técnico.
Aunque no haya voces oficiales al respecto, Diego Cocca está obligado a encontrar resultados en el corto plazo. No está en discusión la seriedad ni la dedicación por el trabajo del entrenador y sus colaboradores. Pero los auriazules necesitan sumar puntos cuanto antes, por lo que el futuro de Cocca está claramente atado a que se logre ese objetivo.
Hoy, jugados 10 encuentros, Central no logra escaparle a la zona roja de la tabla de los promedios. Los 8 partidos consecutivos sin triunfos, con 7 empates y 1 derrota, aparecen como la primera razón para entender la situación. Y ese factor es el que potencia aún más la necesidad canalla de encontrar cuanto antes una victoria.
Entre los seis rivales que debe enfrentar Central en lo que queda de este 2019 hay tres directos en la pelea por la permanencia: Estudiantes y Central Córdoba de Santiago del Estero, a los que tendrá que visitar; y Aldosivi, a quien recibirá en el Gigante. Entre los rivales restantes, aparecen River (lo visita en el Monumental) y Boca (lo recibe para cerrar el año en Arroyito). Y también debe jugar como local frente a Godoy Cruz.
En cuanto a los contrincantes directos en la lucha por mantenerse en primera, los auriazules ya se enfrentaron con 4 en estas primeras 10 fechas, y empataron con todos 1 a 1: Patronato y Newell’s en el Gigante; Colón y Lanús en condición de visitante.
Tras sumar sólo 13 de los 30 puntos que hubo en juego hasta ahora, Central necesita cosechar algo más de la mitad de los 18 que quedan en disputa. De esa manera, podría cerrar el año calendario con algo de tranquilidad, al menos desde lo matemático. Aunque esto no implique salir de inmediato de la zona roja en la tabla de promedios.
