El uso de cannabis medicinal en el Trastorno Espectro Autista (TEA) ya sea leve, moderado o complejo, logró grandes cambios a través de la ingesta del aceite medicinal de cannabis.
Las personas van modificando el modo de ver la vida, su interacción, su motricidad y desenvolvimiento social, en su interacción con el medio familiar y social cercano, así como la evolución en el aprendizaje.
Así lo afirmó el colectivo de divulgación, información y asesoramiento cannábico Lo de Juana, que indicó que, en general, «los niños y niñas pasan de consumir desde 20 pastillas por día – con efectos altamente adversos a corto mediano y largo plazo- a una gran desconexión a pocas o ninguna pastilla con el tratamiento de aceite medicinal de CBD (cannabinoides)».
A través de un comunicado de prensa, la organización indicó que en el diagnóstico temprano del Trastorno del Espectro Autista «las variables son múltiples y hay que observar a cada niño y niña en particular al momento de diagnosticar y recomendar el uso del cannabis medicinal».
Al respecto indicó que «en el proceso se solicita mucha observación de parte de las familias para detectar cómo reaccionan los Cannabinoides y para poder acertar en la cepa correcta».
Asimismo, manifestó que «las investigaciones han destacado la efectividad del cannabis medicinal para tratar el autismo porque mejora el comportamiento y las capacidades comunicacionales».
«Y es que se ha descubierto que hay una conexión entre el autismo y los receptores cannabinoides, tal como los receptores cannabinoides 2 (CB2) y el sistema endocannabinoil», añadió.
En 2016 se realizó un estudio con un niño de 6 años diagnosticado con este padecimiento y gracias a este informe se pudo demostrar que el cannabis medicinal para tratar el autismo era efectivo.
Durante 6 meses, el niño llevó a cabo un tratamiento con THC y logró que su condición mejorara en aspectos como hiperactividad, letargia, irritabilidad, estereotipos o discursos inapropiados.
«Estos datos y muchísimos otros más, contribuyen a destigmatizar la palabra marihuana. El Cannabis medicinal es un medicamento y hay que poder distinguirlo de su uso recreatvo. En estos tratamientos no hay magia: hay proceso, evolución y sostenimiento. No a todos les funciona igual el Tratamiento con Aceite Medicinal de Cannabis, aunque sí podemos afirmar que a un gran número de niños y niñas los mejora radicalmente», aseguró el colectivo Lo de Juana.
Por tal motivo, en el comunicado indicó que «es sumamente importante contar con leyes libres de prejuicios arcaicos» y se remarcó que «estas cuestiones son relativas a la salud, a los derechos de la niñez y de plenitud de su pleno desarrollo en niños y niñas con autismo.
«Alzamos las voces y convocamos a las familias usuarias de cannabis medicinal, que se hermanen y tejan alianza para las familias que aún no pueden acceder o no conocen estos beneficios», concluyó el escrito.