Con la publicación de la ordenanza aprobada en diciembre pasado, avanza la integración entre las cámaras de videovigilancia y las alarmas comunitarias instaladas en el ámbito de la Municipalidad con el Centro de Monitoreo local, a los fines de favorecer el accionar policial y de control ante un delito, fundamentalmente en los barrios.
«La idea es potenciar el alcance de las alarmas comunitarias que los vecinos han colocado por su cuenta en sus barrios. Hoy su alcance es hasta donde llega el sonido o la luz y tiene un efecto disuasorio y depende de la movilización vecinal. Por eso la integración al monitoreo general es un paso más para la respuesta estatal y de organismos especializados», explicó el concejal Roy López Molina (Cambiemos).
«El objetivo es contar con un sistema integral e integrado entre estos instrumentos disuasivos y preventivos. Esto permite una mayor precisión y celeridad para la respuesta de las fuerzas de seguridad y los organismos de control. Será más moderno y eficiente”, agregó el presidente de la Comisión de Control, Convivencia y Seguridad Ciudadana del Concejo Municipal, de la que surgió el proyecto a partir de la iniciativa del concejal Ariel Cozzoni.
López Molina recordó los casos de los municipios de Tigre, Vicente López, Lomas de Zamora y de la ciudad de Santa Fe como antecedentes a esta ordenanza aprobada. En el caso de Rosario, serán unas 162 videocámaras que deberán funcionar junto a unos 320 paneles de dispositivos vecinales.
Relevamiento barrio por barrio
Anteriormente, el Concejo Municipal reguló la instalación de alarmas comunitarias e inclusive autorizó el uso de las columnas de alumbrado público para conectarlas.
Ya en 2014, tras otra iniciativa de Roy López Molina, el cuerpo sancionó una norma que establecía un relevamiento de las alarmas comunitarias existentes y a su finalización la vinculación de las mismas con los organismos municipales y/o provinciales encargados de realizar el monitoreo. El Departamento Ejecutivo ya lo realizó en los barrios Villa Urquiza, Las Heras, Unión, Agote y Azcuénaga.
“Con los avances tecnológicos con que contamos, corresponde dar un paso más en la integración de los sistemas de prevención y de seguridad implementados tanto por la Municipalidad de Rosario como por parte de los vecinos. Ahora son las alarmas y las cámaras unificadas en un mismo Centro”, dijo el edil.
“A medida que avanzan las posibilidades técnicas y tecnológicas de asistir a los vecinos en materia de seguridad, corresponde que hagamos todos los esfuerzos posibles. Quedarse de brazos cruzados es entregarse al problema crónico de los arrebatos y entraderas, fundamentalmente en los barrios”, concluyó.