Un avión que había partido este domingo del Aeropuerto de Ezeiza rumbo a la ciudad colombiana de Bogotá debió retornar a suelo argentino por un desperfecto técnico que obligo a los pilotos a desprenderse de combustible, siguiendo el protocolo de seguridad. Se trata de un Boeing 787-8 Dreamliner de Avianca que realizaba el vuelo AV088.
Tras despegar a las 8.30 del Aeropuerto Internacional de Ezeiza «Ministro Pistarini», la aeronave sufrió un desperfecto técnico en los «flaps», el mecanismo del ala que permite la sustentación en distintos momentos del vuelo.
Ante el percance sufrido por el avión, el piloto informó de la situación a los pasajeros a través del sistema de parlantes y, pese a que manifestó que se encontraba bajo control, algunos se asustaron.
«Van a ver combustible despedido por la ventanilla», advirtió el hombre a cargo de la aeronave, quien explicó a los pasajeros que esa maniobra era «para alivianar el peso» y poder tener mayor control del avión.
Luego de derramar en el aire cientos de litros de combustible, el Boeing 787-8 Dreamliner aterrizó en la pista de Ezeiza, en donde aguardaban autobombas de los bomberos y ambulancias, tal como establecen los protocolos de seguridad.
Las 200 personas que iban a bordo de la aeronave están fuera de peligro y permanecerán esta noche alojados en un hotel, ya que el vuelo hacia Bogotá fue reprogramado para este lunes 15 de octubre a las 6.30.
«El AV0088 regresó a Buenos Aires debido motivos técnicos, la seguridad de los viajeros es prioridad para nosotros, por ello tomamos medidas preventivas con el fin de viajar seguros», explicó Avianca a través de su cuenta de Twitter de atención al cliente.