Yamile Baidón y Charly Samamé son dos músicos locales con un amplio recorrido. Ambos, amantes del jazz y la música brasileña, se cruzaron profesionalmente, y de ese encuentro nació Me río, un disco que, editado por la Editorial Municipal, reúne parte de su recorrido en conjunto, es decir el de un dúo artístico que surgió en 2011 y se sostiene a fuerza de investigación y talento.
“Empezamos versionando y después surgió la idea de hacer algunas canciones propias. Si bien tenemos pensamientos muy diferentes en tanto estilo, hay un punto de unión; trabajamos desde esas coincidencias”, reconoció Baidón en diálogo con El Ciudadano adelantando la presentación del disco que tendrá lugar mañana, a partir de las 21.30, en el Túnel 4 del Centro Cultural Parque de España (Sarmiento y el río).
“Compartimos el gusto por la música brasileña, autores como Milton Nascimento, Tom Jobim y Joao Gilberto. Después, también, compartimos el gusto por el jazz y la bosanova”, puntualizó.
Las influencias y referentes pueden adelantar parte del recorrido de Me río, un material integrado, en su mayoría, por canciones compuestas por el dúo, pero en el que también suenan temas como “Eclipse” y “Salvador”, de Egberto Gismonti, y “Circo Marimbondo” de Milton Nascimento.
“Incluimos tres temas de autores brasileños, el resto son composiciones nuestras –aclaró Samamé–. Es un disco más autoral que de reversiones. Empezamos teniendo algunos trabajos donde teníamos que tocar jazz y música brasileña, estilos que son una escuela para todos los músicos. Ese lenguaje armónico es un punto en común. Yamile, además de ser cantante, es pianista, así que tenemos un punto en común que tiene que ver con el lenguaje armónico y la improvisación que viene del jazz; y la música brasileña va muy bien con eso, así que fue natural, no fue algo que planeamos”.
Pero a la hora de recorrer Me río, la aclaración de Samamé surgió al instante: “No es un disco de música brasileña”, dijo, y afirmó: “Es un disco autoral en el que los dos componemos, en el que siempre está dando vueltas el género canción”.
Y son estas canciones las que cuentan con pinceladas de jazz, bossa y pop que no podrían formar parte de un disco de rock, ni de trova. “Es música popular con lenguaje de jazz”, definió el guitarrista.
“La sonoridad del dúo está basada en voces y guitarra criolla. Eso le da un color que no es del jazz sino el de la música popular. Y la presencia del río, por más que no grabamos folclore, siempre está. Ensayábamos en la casa de Yamile que está cerca del río, y en tanto música brasileña está «Río de Janeiro»”.
Así surgió el título, el concepto lúdico que la dupla eligió para denominar un material en el que toda la instrumentación y las letras están al servicio de la creación de climas y el recorrido de paisajes y colores; incluso contando con la voz de Baidón como uno de los instrumentos protagonistas. “Tiene que ver con el juego, con la improvisación del jazz”, dijo ella mientras, a la hora de hablar de su propia forma de componer, habló del entrecruzamiento estético. “Me gusta mucho cruzar los colores con las letras. El disco también tiene algunos colorcitos en los nombres, en los temas”, contó, enumerando composiciones como “Luna Azul” o aquella que reza: “Luz cuando mirás veo, gris plata de mar te vas”, y se titula “Amarillo”. “Para mí, el color de una música refiere al paisaje”, agregó Samamé. “Podés buscar una sonoridad un poco más urbana, dar esa imagen o una sonoridad más nocturna. Según los colores de los instrumentos, podés remitir más al bosque o a la selva. Este es un disco más urbano pero con elementos de la naturaleza”. Las palabras del guitarrista son completadas por la cantante: “La naturaleza está en medio de las letras, tiene que ver con historias personales pero llevadas a un plano entre lo romántico y la idealización. No son temáticas buscapleitos o de reacción, es una temática más idealista que tiende a pintar un paisaje. La música tiene una imagen y sí o sí, una guitarra acústica y la voz, instrumentos acústicos, nada sintetizados, dan un ambiente o una imagen mucho más real o cotidiana”.