Los nacimientos en Argentina han disminuido en forma significativa con respecto a los últimos años, con registros que también muestran un descenso en la tasa global de fecundidad en el país, según datos oficiales. Se trata de una tendencia que especialistas vinculan con la reducción de embarazos no deseados.
De acuerdo con cifras del Ministerio de Salud de la Nación unos 738.318 nacidos vivos se registraron en todo el país durante 2012, mientras que el año anterior hubo 758.042.
La baja en la tasa de natalidad en Argentina resulta significativa también respecto a 2010, donde se registraron unos 756.176 nacimientos. En 2009, los nacidos vivos fueron 745.336, y en 2008, los nacimientos fueron 746.460.
Los datos publicados por la cartera sanitaria nacional corresponden a la Dirección de Estadísticas e Información en Salud (Deis).
El concepto de nacidos vivos está referido a la expulsión o extracción completa del cuerpo de la madre prescindiendo de la duración del embarazo, de un producto de la concepción que, después de tal separación, respire o manifieste cualquier otro signo de vida, tal como el latido del corazón, pulsaciones del cordón umbilical, o movimiento efectivo de músculos voluntarios, haya o no haya sido cortado el cordón umbilical y esté o no unida la placenta.
Del total de nacidos vivos en el país durante 2012, unos 282.031 nacimientos se produjeron en la provincia de Buenos Aires y 43.733 en la Capital Federal. En la provincia de Córdoba, la cifra ascendió a 56.864 nacimientos, mientras que en Santa Fe se registró un número similar, 54.056.
En Mendoza, los nacidos vivos fueron de 33.074; en Tucumán, 28.989; en Salta, 26.518; en Misiones, 25.510; en Chaco, 22.041 ; en Entre Ríos, 21.874, todas provincias con natalidades por encima de los 20.000 nacimientos.
Por otro lado, también hubo un descenso en la tasa global de fecundidad en todo el país. Según un indicador que mide el número medio de hijos por mujer a los 50 años -final del ciclo fértil-, se pasó de 2,35 en 2011 a 2,29 en 2012, mientras que hace diez años la cifra ascendía a 2,45.
Para los especialistas, la disminución en la cantidad de hijos y el retraso en la maternidad está relacionada con el mayor nivel educativo de las mujeres.
