El juzgado de Instrucción 15ª fue el marco de una nueva indagatoria para Luis “Pollo” Bassi, donde fue imputado de intervenir en la producción de tres hechos de amenazas agravadas por el uso de arma de fuego y de tener participación en el crimen de Juan Pablo Colasso, ocurrido en noviembre pasado, en la localidad de Villa Gobernador Gálvez. Fuentes del caso mencionaron que Colasso y Bassi tuvieron una relación de amistad muy estrecha, que en algún momento se rompió. Bassi escuchó las acusaciones que se le achacaron y negó cualquier tipo de participación en los delitos que le imputaron, a la vez que prefirió abstenerse y no responder preguntas.
Bassi ingresó al juzgado de Instrucción a cargo de Alejandro Negroni pasadas las 10.30, mientras en la puerta varios de los integrantes de su familia quedaron como haciendo guardia. Su declaración indagatoria coincidió con una serie de medidas que se estaban llevando adelante en el expediente, entre ellas algunas testimoniales, por lo que en la misma dependencia se encontraron el acusado y testigos de la causa.
Pollo fue imputado de cuatro hechos delictivos ocurridos en Villa Gobernador Gálvez: el primero de ellos tuvo lugar el 14 de noviembre de 2012 cerca de las 16.30 en 1º de Mayo y San Martín, donde Juan Pablo Colasso y otras personas que se encontraban en el lugar fueron baleadas. El segundo hecho ocurrió tres horas después cuando, según la imputación, la víctima (Colasso) se cruzó en Soldado Aguirre y Oppici con el imputado y se desató una balacera que se extendió por varias cuadras, lo que quedó evidenciado en algunos vehículos que se encontraban estacionados en la zona, refirió una fuente judicial.
A su vez fue acusado de tirotear, el 15 de noviembre, la casa de la familia Colasso ubicada en Bordabehere al 1400 y de tomar intervención, ya fuese como ideólogo y/o ejecutor, en el crimen de Colasso, ocurrido la madrugada del 16 de noviembre de 2012 en la puerta de su vivienda. El hombre de 31 años fue hallado con tres disparos, uno de ellos en la cabeza, en la puerta de la propiedad con un chaleco antibalas, y una pistola 9 milímetros en la cintura. Estaba junto a su vehículo Peugeot 307 dentro del cual se halló una escopeta de asalto marca Mossberg calibre 12.70.
Según reconstruyó en su momento la pesquisa, un grupo de personas llegó al lugar en al menos dos vehículos y se produjo un intercambio de disparos que terminó con la vida de Colasso. En el lugar se hallaron al menos 20 vainas servidas de diversos calibres, entre ellos 45, 9 y 12 milímetros.
Luego de escuchar la acusación, que encuadró en los delitos de abuso de armas y amenazas calificadas en dos hechos, amenazas con armas y homicidio agravado por el uso de armas, Bassi negó su participación, se abstuvo de declarar y evitó responder preguntas.
Su defensor Iván Mendoza sostuvo que Bassi no declaró ya que no tuvieron acceso al material probatorio en su contra y subrayó que la idea es –entre lunes y martes de la semana próxima– tener acceso al expediente y construir la defensa. Mendoza sostuvo que va a ser un proceso que no se va a resolver en pocos días por lo que “hay que ser prolijo, y dejar trabajar al juzgado”, a lo que agregó que en todos los despachos donde Bassi prestó declaración “hicimos hincapié en su seguridad, respecto al lugar de alojamiento, recalcando que se quede en el pabellón 8 de alcaidía”, concluyó.
Por su parte, fuentes vinculadas al caso refirieron que existen elementos probatorios que hacen mención a la enemistad manifiesta que en el último tiempo existió entre Colasso y Bassi. Si bien ambos mantenían una relación de amistad muy estrecha, ésta en algún momento se rompió y el odio que Colasso mostró por Bassi en los últimos momentos de su vida quedó plasmado en los diferentes mensajes de texto que envió la víctima y por diversos testimonios de quienes recibieron dichos mensajes.
Uno de los datos que trascendió fue que la balacera a la casa de la familia de Colasso fue la gota que terminó de desequilibrar al joven que, según algunas sospechas, se había presentado en la casa del Pollo a los gritos horas previas a su muerte. A su vez, se conoció que durante el jueves y el viernes se tomaron en la causa diversos testimonios e incluso se llevaron adelante algunos careos.
Tras el trámite procesal, Bassi fue escoltado hasta la Alcaidía Mayor donde permanece detenido.
