Central no levanta cabeza. Lleva siete partidos sin ganar, donde apenas acumuló tres puntos sobre 21. Y el título en la Copa Argentina ya no es un escudo protector, aunque Edgardo Bauza aún resiste, aunque la tabla de promedios de la próxima temporada mete presión y preocupa.
La derrota de la semana pasada como local ante Tigre fue un golpe duro. Por eso el lunes hubo una charla del Patón con los directivos más importantes, el presidente Rodolfo Di Pollina y los vices Ricardo Carloni y Martín Lucero. Y tras el cónclave el DT no sintió que tuviera un plazo, o dependiera de un resultado.
Tal vez la ausencia de los máximos directivos, algo no habitual, fue para evitar una charla en vestuario en caso de una derrota. El plantel estuvo acompañado por el vice tercero Marcelo Facciano y el protesorero Esteban Ferreyra. Y en las consultas previas realizadas por El Hincha, la realidad era que Bauza no corría riesgo en caso de una derrota, ni siquiera si la forma era mala.
Ahora está el partido por Copa Argentina del martes, ante Sol de Mayo en Santa Fe. Y el cruce con Belgrano del próximo sábado en el Gigante, donde las obligaciones serán mayores. Y ahí puede definirse el futuro del Patón.