El tercer refuerzo rojinegro de cara a esta temporada, surgido en las divisiones inferiores de Newell’s y campeón con la Rojinegra en 2004, comenzó su segundo ciclo en el club y se mostró feliz de haber podido regresar, además de “ilusionado” con la triple competencia a la que el equipo se enfrentará este año.
“Desde que me fui, siempre tuve la intención de regresar. Tras mi vuelta desde Europa no se dio la posibilidad y luego por cuestiones personales tampoco. Mi deseo siempre fue volver bien y estar acá. Quizás me encuentro en una edad elevada para lo que cree la gente, pero me siento muy bien desde lo físico y de la cabeza”, expresó.
El volante se sumó desde la pasada semana a los entrenamientos en el Centro Griffa y se mostró expectante con la posibilidad de estar en cancha en poco tiempo: “Está todo en condiciones, estoy entrenando a la par del grupo y disponible para cuando el entrenador así lo disponga. Trataré de dar lo mejor, pelearé por un lugar y buscaremos competir en cada certamen”.
Con respecto al jugador que es hoy, comentó: “Depende de cómo se pare el equipo, el sistema, el rival, pero en mi caso puedo adaptarme a estar más atrás para armar y llegar al área sin pelota. Soy un futbolista de posesión, que busca romper líneas con el pase, recibir siempre en espacios donde pueda hacerle daño al rival, puedo aportar remate desde afuera del área, estar cerca para asistir también, un poco de lo que hice siempre. Tal vez hoy me perfilo para darle al equipo la pausa que necesite y pensar un poquito más”.
Además, se refirió a cómo encontró al predio en el que se formó hace ya varios años: “Fue una alegría grande volver al predio y ver todo muy cambiado. Canchas verdes, todo organizado, un hotel increíble. En otras épocas no estábamos con estas condiciones”.