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Biblioteca hecha por pibes, en el club 20 Amigos

En el club 20 Amigos, de Felipe Moré al 3400, jóvenes en riesgo que integran el programa Nueva Oportunidad reconstruyeron un espacio que los chicos de primaria disfrutarán todo el año.

La historia del club Social y Deportivo 20 Amigos, ubicado en Felipe Moré al 3400, se escribe día a día por el complicado contexto que lo rodea. Desde hace casi seis décadas, la institución es un lugar de encuentro para los vecinos de los barrios Moderno y Triángulo, que lo transformó en una institución con un fuerte compromiso con los vecinos y hace unos años trabaja con jóvenes en riesgo. Es a través el programa Nueva Oportunidad, que cuenta con equipos de trabajo territorial y les permite capacitarse y participar de espacios de intercambio y reflexión para que adquieran herramientas de inserción laboral y hábitos de convivencia social, que alrededor de 10 chicos –de entre 18 y 30 años– más allá del aprendizaje de un oficio, dejaron un espacio terminado con sus propias manos: la biblioteca.

Matías Moschini es el presidente de la entidad desde hace dos años y subrayó que lo que hay que rescatar es la articulación que realizan con los centros de salud, centro de día, y de esa manera, se enfocan en la problemática del barrio.

A la hora de contar la experiencia con los chicos en riesgo, el presidente del club marcó: “Cuando pasás mucho tiempo con ellos, los vas entendiendo, porque la vida del adolescente en riesgo, que ha sido alguna vez un soldadito o que estuvo abriendo puertas de taxis, o que viven en una pieza con 11 hermanos, uno recapacita y sabe que es muy poco lo que le podemos dar, pero tratamos de brindarle la mayor contención posible, ellos cuentan con una institución que les abre las puertas”, sostuvo.

El presidente de la institución agregó que “con este grupo en particular los resultados fueron buenos pero también pasaron por malos momentos. La refacción de la biblioteca es una buena experiencia porque quedarán los nombres de ellos para siempre”, destacó.

Matías especificó que la biblioteca se inauguró los primeros días de marzo, en sintonía con el comienzo de clases de las escuelas. “La biblioteca será una herramienta para las escuelas primarias 660 Francisco Narciso Laprida y la 518 Fray Mamerto Esquiú”.

Las actividades que se realizan en el club 20 Amigos son muchas: se practica desde atletismo, taekwondo, boxeo, tela en acrobacia, ajedrez, cuentacuento, taller de teatro, guitarra y dibujo con humor gráfico, entre otros. En total son 23.

Jorgelina Schmidt es acompañante del programa Nueva Oportunidad y trabajadora social del Centro de Salud Mauricio Casals, y contó a El Ciudadano que en junio del año pasado comenzaron a convocar a jóvenes del barrio Triángulo Moderno y el curso que realizaron fue de Mantenimiento Integral de Edificios, es decir, albañilería, electricidad y carpintería.

“El primer desafío fue que cuando llegamos a este sala no era así (refiriéndose a la biblioteca), sino que el techo se caía a pedazos. Los chicos fueron los albañiles del lugar. Es una muy buena experiencia y un marco de posibilidad para que se generen actividades que se marca la singularidad en cada institución de este barrio, porque con el Programa Nueva Oportunidad en toda la provincia cada experiencia es algo distinto y lo que se generó acá fue muy valioso”, contó Jorgelina.

La coordinadora del programa detalló que lo más llamativo fue que la mayoría de los jóvenes viven con su pareja y con sus respectivas familias y se plantearon que necesitan llevar plata a su casa. “La mayoría de los chicos complementaba el curso con changas y se les hacía difícil sostenerlo”, aseguró.

Las voces de los chicos

Franco Moreyra tiene 25 años y fue uno de los pibes que remodeló la biblioteca del club. “Muchos pibes estamos en la calle y al tener un espacio acá tenemos con quién hablar de nuestros problemas. Te escuchan y te apoyan. Con los pibes nos llevamos muy bien. Si en mi casa hay que hacer algún arreglo, ya lo puedo hacer yo”, remarcó.

Franco vive con su mujer y su pequeña hija a cinco cuadras del club 20 Amigos. Ya realizó el curso de panadería y carpintería y va por más. “A través de este programa aprendemos un oficio para el día de mañana poder tener un trabajo fijo. Aprendí mucho y tanto los profesores como los coordinadores del programa son muy piolas”, aseguró el joven.

Otro de los chicos es Gustavo Vargas, tiene 18 años y vive en barrio Ludueña. “Me tomo dos colectivos para llegar al club. Me ayudaron mucho y se los agradezco de corazón. Ya no estoy en la calle y tengo la cabeza ocupada. Voy a empezar el curso de electricidad”, contó el joven.

Nueva Oportunidad

Es un programa de la provincia que cuenta con equipos de trabajo territoriales que convocan a jóvenes de entre 16 y 30 años, que hayan dejado la escuela, no tengan empleo ni formación en oficios. Les permite capacitarse y participar de espacios de intercambio y reflexión para que adquieran herramientas de inserción laboral y hábitos de convivencia social.

Es una experiencia de intervención integral y territorial que aborda la problemática de estos jóvenes considerados en altos niveles de riesgo social; promoviendo acciones de reinserción e inclusión social y laboral en el marco de una política de empleo digno, convivencia ciudadana e igualdad de oportunidades.

Comenzó a funcionar en el año 2013 con la capacitación de 320 jóvenes. A partir de 2014 se desarrolla junto al gobierno provincial en el marco del Plan Abre. En 2015 se capacitaron más de 1.500 jóvenes.

Diferentes equipos territoriales trabajan en forma coordinada para crear lazos institucionales con los jóvenes y acompañarlos en la construcción de un proyecto de vida. En una primera instancia se los incluye en cursos de capacitación laboral para luego diseñar propuestas adecuadas que den continuidad al proceso formativo. Se realizan entrevistas laborales y se trabajan propuestas según el perfil laboral y los procesos subjetivos de cada joven a fin de lograr:

Derivaciones a entrevistas laborales.

Ingreso al plan Volver a la escuela.

Prácticas laborales en empresas.

Emprendimientos.

Especialización en la formación recibida.

Continuar articulación con otras áreas para aquellos casos que requieran intervención: adicciones, problemas con la ley penal, violencia, entre otros.

Otras propuestas culturales o sociales para quienes no responden a las anteriores, siempre con el acompañamiento de los equipos territoriales.

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