El encuentro se llevará a cabo en la Bombonera a partir de las 16 con el arbitraje de Patricio Loustau, designado ayer por la Asociación del Fútbol Argentino en reemplazo de Héctor Baldassi, quien fue intervenido quirúrgicamente ayer de urgencia en una clínica cordobesa a causa de una apendicitis.
Boca, que arrancó como candidato pero figura con 18 puntos a 9 del líder Vélez, llega de todos modos con una racha invicta de cuatro cotejos y el dato saliente de que repetirá la alineación titular por tercer partido consecutivo, algo que no sucedía desde el torneo Apertura 2007 cuando Miguel Russo era el DT.
En tanto, River cuenta con 22 unidades y si bien su aspiración es pujar por los puestos de vanguardia porque sólo lo separan cinco puntos de la cima, lo cierto es que también lo preocupa su promedio de descenso pues está apenas un escalón por encima de la promoción, zona a la que podría caer si pierde mañana.
El conjunto xeneize, que suma 23 títulos pero no se consagra desde el Apertura 2008, superó la fecha pasada a Argentinos Juniors por 2-0, con goles de sus máximas figuras Román Riquelme y Martín Palermo, quien justamente afrontará su último superclásico habida cuenta de que se retirará en junio próximo.
Boca, dirigido por Julio César Falcioni, consiguió así su segundo éxito seguido de visitante tras el logrado ante Huracán (3-0), pero como local está en deuda ya que en sus últimas dos presentaciones registró empates ante Independiente (1-1) y Tigre (3-3) en una serie que buscará saldar mañana ante su eterno rival.
Sin embargo, River, máximo campeón del fútbol argentino con 33 aunque su festejo anterior data del Clausura 2008, pese a que cayó en la fecha pasada en su estadio ante All Boys por 2-0, con lo cual quedó comprometido en los promedios, acumula una racha invicta como visitante desde que asumió Juan José López como DT.
El entrenador debutó justamente en el superclásico del torneo pasado con victoria por 1-0, con gol del defensor Jonathan Maidana, y desde entonces disputó nueve partidos fuera de su cancha en los cuales consiguió cinco victorias y cuatro empates.
Las estadísticas favorecen a Boca, ya que a pesar de la última derrota en Núñez que derivó en la salida de su por entonces DT Claudio Borghi, domina el historial general por 68 a 62, con 57 empates, y en la Bombonera ganó el partido anterior en el Clausura 2010 por 2-0 y no pierde desde el 1-0 del Clausura 2004.
Empero, cada superclásico es una historia distinta y los números suelen resultar relativos, pero lo que seguro no pasará por alto será la reacción que habrá en Boca y River cualquiera sea el ganador de este cotejo, el primero en la historia trasmitido en alta definición (HD) por televisión abierta a través de Canal 7.
El conjunto xeneize, de sumar los tres puntos, consolidará su recuperación y podrá quizá hasta darse el gusto de enviar a su archirrival a la zona de promoción, aunque una caída reavivará la grave crisis que lo aquejó hasta hace escasas fechas y podría hacer tambalear también al entrenador Falcioni.
En tanto, River celebrará un triunfo porque le permitirá seguir en la puja por el título y mantenerse afuera de los puestos de peligro, pero tiene mucho más que perder en caso de una derrota porque podría retroceder al área de reválida con sólo cinco fechas por delante si es que Olimpo vence a Independiente.
En cuanto a las formaciones, el entrenador de Boca, Falcioni, está muy cerca de alcanzar su objetivo de que el equipo se conozca de memoria ya que por tercer partido consecutivo presentará a los mismos once jugadores y esquema táctico de 4-3-1-2.
Riquelme fue el único que estuvo en duda por una contractura en el aductor derecho, pero se recuperó y seguirá como enlace para la dupla ofensiva de Pablo Mouche y Palermo, quien en su último superclásico buscará estirar su serie de tres goles seguidos, luego de haber superado su peor racha histórica en este certamen.
Por el lado de River, Juan José López dejó afuera de la lista de concentrados a Diego Buonanotte, quien igualmente venía siendo suplente, al tiempo que no confirmó el equipo porque aún mantiene una duda en el ataque no sólo de nombres sino también de sistema.
En caso de que siga Rogelio Funes Mori como titular adelante como acompañante de Mariano Pavone, la formación será con 3-4-1-2, aunque también estudia la posibilidad de incluir a Manuel Lanzini como doble enganche junto a Erik Lamela por lo que el diagrama volverá al 3-4-2-1 que utilizó en la primera mitad del torneo.
No obstante, los otros cambios respecto a la caída ante All Boys serán los regresos de Walter Acevedo, recuperado de su lesión, por el peruano Josepmir Ballón, y de Juan Manuel Díaz, quien cumplió la sanción, por Roberto Pereyra, en el mediocampo.
Por último, el defensor Jonathan Maidana, exBoca y autor del tanto en el último superclásico, se rehabilitó del doble esguince de rodilla y tobillo izquierdo sufrido el domingo pasado y seguirá en el conjunto titular, al igual que Alexis Ferrero, quien sufrió problemas gastrointestinales en la semana.
