Bolivia vive días de agitación por las protestas sindicales contra el gobierno de Evo Morales iniciadas hace 12 días en disconformidad con el techo impuesto a un aumento salarial. Ayer continuaron varias rutas bloqueadas y hubo algunos enfrentamientos con la Policía que dejaron ocho heridos. La Central Obrera Boliviana (COB) rechazó dar una tregua y advirtió que continuará con las manifestaciones, mientras que sectores que apoyan al gobierno llamaron a una contramarcha para defender la gestión de Morales, quien, por su lado, decidió recibir hoy a los sindicalistas.
“No hay tregua, seguimos movilizados hasta que el gobierno atienda nuestras demandas”, declaró el líder de la COB, Pedro Montes, quien encabezó en La Paz una nueva jornada de marchas que incluyeron un cerco a la residencia presidencial.
Por su parte, el ministro de la Presidencia, Oscar Coca, volvió a convocar al diálogo, aunque la COB dijo que se reunirá únicamente con Morales, quien accedió a hacerlo hoy.
El saldo de ocho heridos se produjo cuando la Policía chocó con profesores del sector público. Dos de los afectados son efectivos que sufrieron la quema de una motocicleta policial por parte de los manifestantes.
El gobierno rechazó el aumento superior al 10 por ciento, al tiempo que representantes del Ejecutivo aseguran que el grupo sindical “no negocia con seriedad” y lo acusó de tener móviles políticos.
En tanto, los movimientos sociales vinculados al MAS, como la Federación de Cooperativas Mineros de La Paz, se sumaron a la Coordinadora Nacional por el Cambio (Conalcam) de Bolivia que consulta a nivel nacional la realización de una marcha de “pacificación” en defensa del proceso de cambio.
Ante la anunciada contramarcha, Montes aseguró que no le tiene miedo y reconoció el derecho de las organizaciones sociales a manifestarse, pero advirtió que algunos quieren enfrentamientos “entre hermanos” y señaló que “los ministros, viceministros y algunos diputados y senadores serán culpables” si esto ocurre.
“Hay capacidad, hay voluntad y seriedad, no tenemos ningún inconveniente. Apenas nos convoque a la medianoche, a la madrugada, en la tarde, al mediodía vamos a estar presente. Queremos una reunión con el presidente, no con los ministros. La COB va a cumplir y los que no estén acatando deben sumarse a la movilización”, replicó el dirigente sindical.
El presidente del Senado, René Martínez, invitó a los dirigentes de la COB a retomar un diálogo sincero para resolver el punto crucial de su demanda salarial, además que aseguró que esas medidas de presión corresponden “a una minoría de asalariados”, que ocasionan perjuicios a alumnos y el derecho al libre tránsito. Por su lado el presidente de Diputados, Héctor Arce, pidió a los dirigentes reflexionar en sus acciones para profundizar el proceso de cambio y defender los objetivos de transformación política, social y económica del país.