El candidato a gobernador del Frente Progresista, Antonio Bonfatti, volvió a responder las críticas del kirchnerismo y de Cambiemos vinculadas a la seguridad. Bonfatti recordó que Santa Fe es la única provincia que cuenta con una ley de extinción de dominio –algo que aún no sancionó el Congreso a nivel nacional– y agregó: “A quienes nos denostan y atacan, les propongo que nos imiten”.
El ex mandatario, que irá en busca de un nuevo mandato al frente de la Casa Gris, ya había planteado las mismas objeciones en el lanzamiento de su campaña, el último martes en la capital santafesina. Ahora volvió sobre el tema y recordó que Santa Fe es la primera y única provincia del país en contar con una ley de extinción de dominio, que a través de la Agencia Provincial de Registro, Administración y Destino de bienes y derechos patrimoniales (Aprad), subasta los bienes decomisados a bandas delictivas.
En este sentido, Bonfatti se dirigió a quienes critican las políticas de seguridad de Santa Fe: “A quienes nos denostan y atacan, les propongo que nos imiten, les diría que se preocupen porque tienen las mayorías necesarias en el Congreso Nacional para sancionar la extinción de dominio; es hora de que se decidan y nos demuestren de qué lado están: con las organizaciones delictivas o con la democracia y el bienestar de la gente”.
“El objetivo de esta ley es afectar el poder económico de las bandas delictivas, golpear al delito en donde más le duele y darles a los bienes adquiridos ilícitamente un destino que sirva a fines sociales”, afirmó Bonfatti.
En los meses que lleva funcionando la Agencia ya se han realizado un sinnúmero de entregas y donaciones de los elementos incautados, por ejemplo a una escuela técnica de Santo Tomé le fueron entregados motores y cajas de cambio de vehículos que fueron decomisados a un desarmadero.
Además, se indemnizó a siete familias que fueron víctimas de secuestros virtuales con el remate de vehículos incautados a bandas relacionadas con el narcotráfico.
En tanto, un club de la ciudad de Santa Fe recibió kits deportivos que fueron adquiridos con el dinero recaudado en las subastas, y en Casilda, niños y niñas de un hogar recibieron tablets.
