Con la promesa de lograr una Policía “más próxima a la ciudadanía”, el gobernador Antonio Bonfatti puso en funciones ayer a los jefes de los cinco nodos en que fue reestructurada la fuerza. En la oportunidad el mandatario anunció la incorporación de 900 nuevos agentes y los ascensos correspondientes a 2012 y 2013, que alcanzan a 3.020 y 5.300 efectivos, respectivamente.
Las nuevas autoridades policiales son Hugo Rodríguez (Región 1, Nodo Reconquista), Daniel Alcaraz (Región 2, Nodo Rafaela), Héctor Romang (Región 3, Nodo Santa Fe), José Luis Amaya (Región 4, Nodo Rosario) y Rafael Grau (Región 5, Nodo Venado Tuerto). Ayer al mediodía, en el acto de asunción realizado en Santa Fe, Bonfatti les pidió a los jefes regionales que “caminen el territorio” y les anticipó que pedirá “rendición de cuentas” de sus gestiones.
Los 900 nuevos agentes que se incorporan a la fuerza son los cadetes que completaron el primer año de la carrera en el Instituto de Seguridad Pública (Isep). Van a permanecer en Rosario y Santa Fe hasta el 6 de enero para reforzar la prevención durante las fiestas y luego serán derivados a sus respectivos destinos.
Los jefes regionales que asumieron ayer dependerán del jefe de Policía de la provincia, Omar Odriozola, y tendrán a su cargo los jefes de las diecinueve unidades regionales.
Para el ministro de Seguridad, Raúl Lamberto, “la reorganización de los recursos en cinco regiones permitirá contar con una fuerza descentralizada y próxima a la ciudadanía, posibilitando además la producción conjunta de condiciones de seguridad con los gobiernos locales, organizaciones de la sociedad civil y la comunidad en general”.
“Una nueva etapa”
El gobernador Bonfatti dijo en su discurso: “Se inicia una nueva etapa en la Policía, que tenía hasta ahora un jefe y subjefe, un director general y un subdirector general para el abordaje de realidades totalmente diferentes, tanto en lo que hace al delito como al territorio y hasta la cultura; no es lo mismo la Región uno, que la dos, la tres, la cuatro o la cinco. Seguirá habiendo un jefe provincial y el abordaje será uno solo, pero establecimos cinco jefaturas regionales que tendrán su propia plana mayor y habrá un ida y vuelta para definir estrategias específicas”.
El titular del Ejecutivo dijo que para la “readecuación de una estructura centenaria como la institución policial, por la cual tenemos un profundo respeto, avanzamos previamente con todo aquello que concierne al equipamiento y mejoramiento salarial”. Además, mencionó “el enorme esfuerzo realizado en los últimos meses cuando se aumentó el valor de las horas extra, la modernización del 911, el sistema de videovigilancia, los centros de monitoreo y la especialización que supone poner en funcionamiento la Policía de Investigaciones, la Policía Científica, la Táctica y la Comunitaria”.
“El próximo paso”
El ministro Lamberto explicó que “el próximo paso es que cada uno de los jefes elaboren un plan operativo para cada región. Para ello deberán organizar su plana mayor, sus comunicaciones, su movilidad, sus espacios físicos; deberán también establecer un vínculo con los gobiernos locales y, en particular, con las jefaturas de Policía locales”.
En tanto, el secretario de Seguridad Gerardo Chaumont explicó que “la regionalización apunta a un manejo más integral de los recursos humanos. Es decir, que ya el jefe de Región va a poder asignar y redistribuir medios que originalmente estaban bajo la dependencia de distintos jefes regionales. Con este cambio, el jefe de la Región va a poder concentrar recursos y medios para afectarlos a una zona determinada según el mapa del delito”.
