Los datos del censo 2010 –revelados ayer por este diario– que indican que la mitad de los hogares de la provincia aún no tiene acceso a las redes de gas ni cloacas tuvieron su repercusión a nivel oficial. Fue el propio ministro de Gobierno provincial y gobernador electo, Antonio Bonfatti, quien dijo que la situación es conocida desde hace tiempo por la Casa Gris y que es resultado de “décadas y décadas sin respuestas”, apuntando directamente a las administraciones anteriores, todas de signo peronista. Además, el funcionario remarcó que se está trabajando de manera constante para revertir la falta de obras. Desde el Enress recordaron que Santa Fe no escapa a la media nacional y que esta es “una asignatura pendiente” que debe resolverse para mejorar de manera definitiva la calidad de vida de la población y que para eso es necesario incrementar año a año la parte del presupuesto que está destinada a saneamiento.
El próximo gobernador destacó que “no hay que esperar el censo para saber esta realidad”. “Esto es resultado de décadas y décadas de no haber llevado respuestas. Nosotros estamos trabajando para recuperar empresas como Aguas Santafesinas, para llevar acueductos: hay uno terminado, más otro dela Nación, más cuatro adjudicados ya, que son grandes acueductos, para nada más ni nada menos que tomar agua potable. También está el tema de las cloacas, hay un plan que prevé que una equis cantidad de años toda la provincia tenga ese servicio”, explicó en declaraciones.
Por su parte, el titular del Enress, Alberto Muñoz, comentó a El Ciudadano que la cifra que se desprende del censo –y que habla de un 49,7 por ciento del total de los hogares sin cloacas– es la que en líneas generales venían teniendo en el organismo de control. “Hay una asignatura pendiente. Esto pasa acá y también a nivel mundial. Las cifras globales marcan que 1.100 millones de personas en todo el planeta no tiene acceso a agua de calidad y unas 2.200 millones no tienen acceso a las obras de saneamiento necesarias y, sin dudas, Santa Fe forma parte de eso y no escapa a ese fenómeno”, añadió.
El titular del organismo de fiscalización estatal remarcó la necesidad de multiplicar las inversiones para llevar a cabo tareas “que terminan repercutiendo de manera directa en la salud pública de todos los santafesinos”, según afirmó. “Las dos principales razones por las que ha aumentado la expectativa de vida en el mundo son el descubrimiento de las vacunas y la segunda es sencilla y claramente la construcción de las redes de saneamiento. La industria farmacéutica ha aportado lo suyo pero los puntos que señalé con anterioridad explican todo. Eso deja en claro la importancia de las obras de cloacas y de distribución de agua potable para todos y por eso es tan importante que se destinen fondos para que se pueda seguir avanzando”, subrayó.
“Nosotros como ente fiscalizador estamos permanentemente atentos y reuniéndonos con funcionarios provinciales para estar al tanto del avance de las obras de saneamiento. La provincia de Santa Fe ha presentado un programa de construcción de acueductos que ha sido ampliamente difundido”.
Más adelante, Muñoz insistió en la necesidad de destinar cada vez más fondos para que a su vez sean cada vez más las obras que se llevan a cabo. “Lo destinado en el presupuesto para todo lo que sean obras de saneamiento debe ir creciendo año a año para conseguir una meta que es muy amplia y compleja pero necesaria y nunca conseguida, y que es que todos los hogares santafesinos tengan acceso a agua de calidad y cloacas. Debemos reconocer que los recursos han ido creciendo, pero lamentablemente en este tema siempre es poco”, estimó
“Por otra parte, la red de agua potable de Rosario tiene 130 años y la de la ciudad de Santa Fe 104 años, lo que significa que además de lo nuevo que se necesita para ampliarla, hay que estar atento a las distintas refacciones necesarias por la antigüedad de las mismas. Además hay más de cincuenta localidades en todo el territorio provincial que no tienen agua de red. Son cifras importantes que deben revisarse todo el tiempo porque estamos hablando de cosas que son absolutamente básicas y necesarias para la vida humana, ni más ni menos”, concluyó.