Mientras los senadores negociaban hasta última hora de ayer la letra chica de la reforma tributaria, el gobernador Antonio Bonfatti confirmó que enviará un proyecto a la Legislatura pidiendo autorización para tomar deuda por 400 millones de dólares y financiar, con esos recursos, obras de envergadura que se desarrollarán en el largo plazo. Para ello, primero el Ejecutivo deberá acordar con la oposición justicialista el monto y las características del endeudamiento.
Bonfatti admitió que pedirá que se vote un endeudamiento millonario para encarar obras emblemáticas en distintos puntos de la provincia. “Además de la reforma tributaria, vamos a enviar un pedido de endeudamiento para obras de infraestructura de gran envergadura que acordaremos entre el oficialismo y la oposición. No son obras caprichosas; son obras necesarias para hacer valer derechos impostergables. Estas obras rondarían una inversión de 400 millones de dólares”, explicó.
En las últimas semanas se había especulado con la posibilidad de que el Frente Progresista incorpore, en el debate por la reforma fiscal, el pedido de endeudamiento. El senador radical Hugo Marcucci había sugerido esa idea la semana pasada, pero finalmente el gobernador resolvió que los dos temas –el aumento de impuestos y la autorización para tomar deuda– se debatan por separado. No obstante, la intención de Bonfatti es lograr que el Senado incorpore esta tarde, en el proyecto de la reforma, una cláusula que autorice al Ejecutivo a tomar endeudamiento.
Por otro lado, el mandatario aseguró que es inminente la primera colocación de Letras del Tesoro, por parte de la provincia. Antes, el gobierno ya había emitido cheques diferidos para afrontar las obligaciones más inmediatas con proveedores del Estado y contratistas de obra pública.
“Ya hemos emitido cheques a fecha y estamos ahora a punto de emitir Letras del Tesoro”, sostuvo Bonfatti, aunque no precisó la cifra de la operación. “También hay que pensar en cada paso que uno va dando porque en el mes de noviembre tenemos que ir recuperando los cheques a fecha o las Letras; entonces tampoco podemos ser imprudentes, emitir alocadamente y que después no tengamos cómo levantar esas deudas. Hay que ser cautelosos”, concluyó.
Una reforma conversada
Desde la mañana de ayer y hasta el cierre de esta edición, los senadores del PJ mantuvieron distintas reuniones para acordar un dictamen conjunto y lograr que el tema llegue al recinto con posibilidades ciertas de ser aprobado. Los senadores de la oposición, además, conversaron con sus pares de la UCR sobre algunos de los cambios que introducirán en el texto original remitido por el Ejecutivo en abril.
Una de las modificaciones consiste en eliminar el artículo que faculta al Ejecutivo a fijar el monto de los sucesivos aumentos de impuestos por seis años sin necesidad de aval legislativo. Además, buscarán moderar el impacto del revalúo fiscal que incide en forma directa en el impuesto Inmobiliario Rural y Urbano. El punto más conflictivo –Ingresos Brutos– fue el que más arduos debates originó en la Legislatura, ya que hay posiciones diversas dentro de cada uno de los espacios políticos.
