El vicepresidente, Amado Boudou, se presentó esta mañana en los tribunales federales de Comodoro Py donde presentó dos escritos ante el juez federal Ariel Lijo por la causa Ciccone. «Yo no tengo nada que ver, vine a presentarme y estar a disposición del juez», dijo el titular del Senado al salir de la sede judicial.
«Queríamos estar a rápida disposición como siempre», amplió luego de la presentación espontánea. Las presentaciones las terminó de elaborar esta mañana con sus abogados, según pudo saber ámbito.com de fuentes allegadas al jefe del Senado. En las presentaciones se pededefinir»los antes posible su situación». Antes de llegar su abogado dijo que «se presenta porque no tiene nada que esconder».
En las presentaciones el vicepresidente le comunica a las autoridades judiciales que no se amparará en sus fueros y que está dispuestos a declarar en cuanto se lo requieran. Del encuentro participaron el Juez Ariel Lijo, tres secretarios del tribunal, el propio Boudou y sus dos abogados Eduardo Durañona y Diego Pirota, y el vicepresidente proclamó su inocencia y negó haber mantenido reuniones con la familia Ciccone.
Tras realizar sus manifestaciones ante el juez y presentar los escritos, Boudou se retiró de los tribunales donde debió auxiliar a una mujer que, empujada por el tumulto de periodistas, cayó en las escalinatas.
Al retirarse del edificio el vicepresidente manifestó ante los periodistas que se encontraba sorprendido por el pedido de indagatoria formulado por el fiscal Di Lello pero que pretendía «una acción rápida y con celeridad».»Soy el principal interesado» en que la causa siga su curso porque las acusaciones «son todas mentiras», indicó Boudou.
Desde temprano el vice se reunió con su grupo de abogados para delinear las presentaciones donde se pedirá que la Justicia «defina lo antes posible» la situación de Boudou. Según confiaron fuentes a este medio se busca achicar los tiempos ya que cuanto más se extienda el proceso, los «medios hegemónicos» tendrán mayores posibilidades de «vapulear la figura de Boudou».
Estas declaraciones están en línea con lo que expresó esta mañana el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, en su conferencia de prensa matinal cuando dijo que hay una «persecución» mediática sobre el vicepresidente y resaltó que los medios fueron adelantando las medidas que fue tomando el fiscal.
Ayer, el fiscal federal Jorge Di Lello pidió e la indagatoria del vicepresidente así como del titular de la Afip, Ricardo Echegaray, por supuestas negociaciones incompatibles con la función pública a raíz de su intervención en la venta de la empresa ex Ciccone Calcográfica.
Luego de dos años de iniciada la causa, en febrero de 2012, el fiscal pidió la indagatoria de Boudou, Echegaray, del socio y amigo del vicepresidente José María Núñez Carmona, y del abogado Alejandro Vandenbroele.
Vandenbroele en nombre de la firma The Old Fund adquirió la Compañía de Valores Sudamericana (CVS), luego de conseguir un dictamen a favor del Ministerio de Economía para que se le levantase la quiebra.
El pedido del fiscal incluye a Nicolás Ciccone, entonces dueño de la empresa antes de cambiar de manos; de su yerno Guillermo Reinwick; de Rafael Resnick Brenner, jefe de Asesores de la Afip, y de Máximo Lanusse, quien acompañó a Vandenbroele en The Old Fund.