Familiares de reclusos de las Unidades Penales 2 de la Flores, en la capital provincial, y de la Unidad 1 de Coronda reclamaron este sábado por la mañana la demora en el ingreso para la visita. En la cárcel de la Flores, hubo quema de cubiertas en el portón de ingreso mientras que en Coronda sólo hubo un intento de incendiar algunos cartones donde las familias dieron cuenta de la incertidumbre que les generaba el retraso en el ingreso a los penales. Los episodios se normalizaron luego de que los familiares hablaran con autoridades del Servicio Penitenciario de cada penal. En ese marco, Pablo Cococcioni, coordinador del área de Gabinete y Articulación con el Poder Judicial del Ministerio de Seguridad, recordó en declaraciones radiales la reformulación del sistema de visitas luego de que desbarataran a una banda cobraba a familiares por un lugar en la cola en la Unidad 11 de Piñero.
Los familiares de los internos de Las Flores contaron en declaraciones a Aire de Santa Fe, que hubo un cambio en la modalidad de ingreso en el horario de visitas. Esta situación provocó una demora que generó incertidumbre y tensión en los allegados, de los cuales algunos estaban aguardando en la fila desde las 20 de este viernes. Cerca de las 7 y al advertir que las puertas no se abrían hubo quema de cubiertas, colchones y algunos empujones al portón de entrada al penal, ubicado en avenida Blas Parera al 9200, de Santa Fe. Luego, personal policial montó un operativo y las autoridades de la cárcel se acercaron a dialogar con los familiares y el ingreso se reanudó con algunos reparos de los allegados luego de que se enteraran las nuevas modalidades.
“Nos cansamos de esperar, porque no hacen como siempre por orden de llegada. Ingresan del número 40 en adelante y no dejan entrar a los anteriores. Por qué no hacen como antes”, explicó una mujer en declaraciones a Aire de Santa Fe.
En la cárcel de Coronda, el periodista Walter Zerbatto, de Cablevideo Digital, también reportó que hubo reclamos debido a la forma de organizar los turnos de ingreso. El periodista explicó que la gente estaba cansada demora debido a que algunos de ellos estaban desde 2 de la madrugada esperando para entrar.
Las disposiciones
Estos se generaron luego de que a principios de este mes se conociera una investigación de los fiscales de Rosario sobre una banda dedicada al cobro de dinero a los familiares por un lugar en la cola de la visita a la Unidad 11 de Piñero. Tras una serie de allanamientos para dar con una mujer de barrio Tablada, conocida como Gringa y sindicada como líder de la banda que responde al clan Ungaro, el domingo 10 de agosto se produjo un ataque a balazos contra las personas que esperaban visitar a sus familiares en la cárcel de Piñero que dejó dos heridos con disparos en las piernas. La Gringa, como se conoce a Ramona A., y Claudio A., de 29 años y sindicado como el autor de los disparos en Piñero fueron apresados al sábado siguiente. Al otro día y también en el ingreso de Piñero, una joven sufrió una brutal golpiza y el robo del bolso que llevaba por parte de un grupo de mujeres, quienes la señalaban por los disparos.
En ese marco, Cococcioni adelantó esta semana en declaraciones radiales se reformulará el sistema de visitas en algunos penales. “Vamos a estar avisando a los reclusos y a su familia sobre la modalidad. A partir de ahora, las visitas se distribuirán a lo largo de casi toda la semana, para evitar demoras y cuellos de botella”, explicó.