Después de algunas idas y vueltas, la dirigencia de Central logró completar los requisitos necesarios como para que el plantel pueda comenzar los entrenamientos el lunes. Para ello, fue clave el acuerdo que se concretó con la empresa de salud que realizará los testeos, que se llevarán a cabo el sábado a primera hora en Arroyo Seco. Los resultados estarán listos para el domingo a última hora, lo que permitirá que el lunes arranquen las prácticas bajo los estrictos protocolos sanitarios que dio a conocer AFA en los últimos días.
Trabajando contra reloj en los detalles para la tan esperada vuelta, la dirigencia chocó contra problemas logísticos y económicos. En otras palabras, hubo que definir quiénes integrarán el grupo de trabajo que se presentará el lunes en Arroyo Seco (plantel, cuerpo técnico, auxiliares), conseguir a tiempo los hisopados para detectar Covid, y cubrir el costo de los mismos.
Para la solución del tema “testeos médicos” fue importante la intervención de Plenit y el Sanatorio de la Mujer, que se harán cargo de la realización de los exámenes y de obtener los resultados en el tiempo que necesitaban los auriazules. Además, con un costo inferior (4.200 pesos cada test) al que se barajaba en un principio (5.000 cada uno). Central se hará cargo de ese gasto, aunque charlarán en AFA respecto del apoyo económico que los clubes esperaban recibir.
Lo recomendado por el protocolo sanitario de AFA era el hisopado. Pero luego se supo que desde la casa madre del fútbol argentino se harían cargo de los exámenes serológicos, menos efectivos que los hisopados, que cuestan entre 1.000 y 1.500 pesos cada uno. Este inconveniente, sumado principalmente a cuestiones de logística, derivó en que Central no hiciera tiempo ayer para llevar a cabo hoy el primer control de hisopados.
Para comenzar con las prácticas el lunes en el country, como está previsto por el cuerpo técnico auriazul, todos los que participen de los trabajos de esa jornada deberán someterse a un hisopado el sábado. Se trataría, entre jugadores, cuerpo técnico, auxiliares, y personal de Arroyo Seco, de unas 50 personas. Por lo tanto, generaría un gasto de poco más de 200 mil pesos para el testeo inicial y el mismo gasto para el examen del lunes. De esos 400 mil pesos, según lo pactado previamente, debería hacerse cargo AFA. Pero el tema está en discusión, más allá de que hace un tiempo el presidente Claudio Tapia recibió 600 mil dólares de parte de Conmebol para ayudar a los clubes con los costos de esos testeos.
La cuestión económica no es menor. Central, como el resto de los clubes del fútbol argentino, tendrá que hacer frente al gasto de casi un millón de pesos por mes en testeos. Pero, además, al menos en el arranque de las prácticas, los auriazules tuvieron que resolver cuestiones logísticas que se complicaron a partir de la falta de apoyo de la AFA.
En cuanto a los entrenamientos, el cuerpo técnico canalla definía anoche, entre dos opciones, cómo trabajarían con entre 30 y 32 jugadores desde el lunes. Una de ellas es que los futbolistas practiquen divididos en tres turnos diferentes utilizando dos canchas del predio de Arroyo Seco. En cada uno de esos turnos trabajarían 2 grupos de hasta 6 jugadores cada uno. La otra es que los futbolistas practiquen en dos turnos empleando tres canchas del country. En ese caso, en cada turno entrenarían 3 grupos de hasta 6 jugadores cada uno.
De cualquiera de las dos formas, el entrenamiento ser llevaría a cabo bajo el sistema de «burbuja». Esto implica que, al menos durante las dos primeras semanas de prácticas, la composición de esos grupos no se modificará, incluyendo a los encargados de supervisar las tareas de cada grupo.
