Tras una nueva audiencia, la Cámara de Apelaciones del Segundo Circuito de Nueva York evitó ayer resolver sobre el reclamo de la Argentina y el Citibank para hacer frente al pago de futuros vencimientos de deuda eludiendo así el bloqueo impuesto por un fallo del juez Thomas Griesa. De todos modos, la Cámara prometió dar un veredicto antes del 30, cuando vencen los intereses de los bonos Par.
Por pedido de la entidad financiera y de los representantes de la Argentina, el Tribunal realizó una audiencia en la que también participaron delegados de los fondos buitre, y que duró alrededor de una hora y cuarto.
Los jueces escucharon los argumentos de las partes, incluyendo los de un abogado de los fondos especulativos, y los sometieron a una dura batería de preguntas.
En la audiencia, la abogada del Citigroup, Karen Wagner, admitió que la entidad financiera debería afrontar un “serio e inminente riesgo” si el juez Griesa no le permitiese hacer frente al pago de vencimientos, como el que ocurrirá el 30 de septiembre por casi 200 millones de dólares.
La letrada sostuvo que el banco “sin duda” recibirá los fondos que envíe el gobierno, pero aclaró que si la Cámara bloquea el pago obedecerá esa resolución.
Ante la exposición de Wagner, uno de los jueces, Barrington Parker, aseguró: “No sé cómo puede argumentar seriamente que los bonos bajo ley argentina no están cubiertos por la orden judicial”.
Además de Parker, el tribunal está integrado por Reena Raggi y la demócrata Rosemary Pooler, los mismos que avalaron el fallo de Griesa en contra de la Argentina que favoreció a los fondos buitre, que finalmente fue convalidado por la Corte Suprema de Estados Unidos al rechazar su tratamiento.
El banco también propuso a los jueces otorgar un “stay” o amparo para poder realizar los desembolsos a bonistas con títulos reestructurados.
El Citibank aseguró que se enfrenta a “sanciones graves” por parte de la Argentina si acata la orden de Griesa que impide hacer los pagos.
“Vamos a obedecer, y si obedecemos, tenemos un arma en nuestra cabeza”, dramatizó la abogada de Citibank y le preguntó al tribunal: “¿Qué cosa buena es la que podemos hacer? Esto no cambiará lo que hace la Argentina”.
En la audiencia también participaron los abogados de la Argentina, Carmine Boccuzzi y Jonathan Blackman, del estudio Cleary Gottlieb.
La jueza Raggi efectuó duros cuestionamientos durante la audiencia sobre la negativa a acatar fallos sobre deuda y se mostró interesada en saber qué hará la Argentina si la decisión de la Cámara es desfavorable.
Roy Englert, abogado que representa a los fondos buitre, argumentó que la orden de Griesa incluye a los bonos de los canjes del 2005 y el 2010, sin distinguir su denominación o la ley bajo la cual fueron emitidos.
La Cámara no tiene un plazo para dictar una resolución, pero se espera que lo haga antes del 30 de septiembre, aunque también podría devolver la causa a Griesa.
Ese juez mantiene bloqueado en el Bank of New York un depósito de 539 millones de dólares que efectuó la Argentina para tenedores de bonos reestructurados bajo legislación estadounidenses, situación que llevó al país a un default parcial de su deuda.
En ese momento, el juez autorizó sin embargo que por única vez Citibank pagase los intereses de bonos emitidos bajo legislación argentina, y que se encontraban en un limbo jurídico. La llegada de un nuevo vencimiento volvió a llevar la cuestión ante la Justicia.