Un barco que trasladaba soja desde Villa Gobernador Gálvez hacia Francia varó a la salida del puerto y complica desde hace diez días el transporte de carga por el río Paraná. Otras sesenta embarcaciones tienen impedido el paso aguas arriba y abajo en el curso del río, afectando la actividad de las terminales portuarias de la zona. Si bien resta investigar las causas que llevaron a que el buque encallara, lo cierto es que los intentos por zafarlo de la varadura fueron inútiles desde el primer día, aún con la utilización de dos remolcadores.
Se espera que hoy el buque recupere flotabilidad luego de que unas 3.500 toneladas de la carga que transportaba fuera transferida a barcazas.
Desde la Cámara de Actividad Portuaria Marítima estimaron que las pérdidas económicas ocasionadas por el percance superan los 20 mil dólares por día, sumando a las propias del buque paralizado los de los que tienen bloqueado el paso.
Aguas difíciles
El episodio fue originado por el barco tipo Panamax bautizado “Paraskevi”, de bandera chipriota, que había cargado en la terminal de Cargill en Villa Gobernador Gálvez poroto de soja proveniente de Paraguay.
La embarcación, de 225 metros de eslora y 32,35 de manga, fue construida en 2003 y encalló el lunes 10 a las 14.30 en el kilómetro 408 del río Paraná cuando había emprendido viaje hacia el puerto francés de Brest.
Los motores del buque intentaron infructuosamente zafar de la varadura y hubo que recurrir a los remolcadores “El Argentino” y “El Tifón”, que tampoco pudieron hacer que se desprendiera del lecho del río.
Se decidió entonces proceder al alije de la carga traspasándola a barcazas para que el buque pierda peso y pueda volver a flotar.
La idea original, para la que se trabajó desde la semana pasada, era quitarle 6 mil toneladas de carga, pero el trabajo se hizo muy lento por la rotura en grampas y grúas, de modo que se decidió trasvasar sólo 3.500 toneladas antes de volver a intentar moverlo, según detallaron fuentes de la Cámara de Actividad Portuaria Marítima.
Tráfico detenido
A la espera de estas maniobras hay una decena de barcos de gran porte aguas arriba ya que el buque encallado obstruye de forma parcial el canal de navegación. Aguas abajo otros cincuenta navíos también están detenidos ya que se teme que su calado les impida pasar por el lugar, donde el canal tiene 10,36 metros de profundidad.
Los que pudieron pasar lo hicieron con asistencia de un remolcador y navegando con luz diurna.
Cuando el “Paraskevi” sea removido, lo que se espera que ocurra hoy a mediodía, será remolcado aguas abajo hasta donde pueda ser inspeccionado y se decidirá si está condiciones de afrontar el viaje oceánico hacia su destino.
De ser así se reencontrará con la carga transferida, que volverá a sus bodegas para seguir rumbo a Francia.
“Sacá la cuenta: tener parado un barco de carga de este tipo te sale 20 mil dólares por día. La mercadería no se pierde pero después tenés que pagar el costo de rescate. Es una cifra millonaria”, ilustró en diálogo con El Ciudadano Guillermo Wade, gerente de la Cámara de Actividades Portuarias Marítimas.
Otro bloqueo, dos años atrás
Como antecedente del caso del “Paraskevi” un hecho similar ocurrió en enero del 2012 cuando el buque “Aristeas P” mantuvo durante días enteros bloqueado el paso de todos los grandes barcos cerealeros en esta zona del Paraná.
Esa embarcación, de bandera liberiana, había zarpado la semana anterior del puerto de San Lorenzo con destino al Reino Unido, con una carga de 30.500 toneladas de pellet de soja.
Otros cuarenta y nueve buques mercantes quedaron fondeados en áreas de espera prefijadas al no poder utilizar el canal del río y la situación quedó resuelta recién cuando se dragó un paso que permitió el desplazamiento de los cargueros de gran porte.
En esa oportunidad se barajó que la causal de la varadura había sido la bajante que experimentaba el río, lo cual hay que descartar en este último episodio ya que el Paraná tiene buen caudal en estos días.
