Fernando Burlando, uno de los abogados de la familia de Fernando Báez Sosa, asesinado a la salida de un boliche en Villa Gesell, consideró este jueves que existen «bastantes elementos» en la causa para condenar a los responsables del crimen a «prisión perpetua» y agregó: “La única pena para estos animales es la perpetua”.
En tanto que este jueves comenzó la rueda de reconocimiento, donde uno de los testigos identificó a un detenido como el autor del primer golpe a Fernando; además de otros dos que golpearon a la víctima cuando ésta estaba en el suelo inconsciente.
El letrado aseguró este jueves en declaraciones a radio Mitre que «la causa está muy bien encaminada» y que «la Fiscalía ha tomado con mucha seriedad la instrucción». En tanto que luego de la rueda de reconocimiento agregó que dos de los testigos señalaron a Máximo Thomsen, uno de los dos rugbiers imputados como «coautores» del homicidio, como la persona que le pegó cuando estaba en el suelo e inconsciente. El otro sería Ciro Pertossi, según dijeron fuentes judiciales.
«Creo que tenemos bastantes elementos como para pensar que esto no va a terminar de otra manera que con una condena a prisión perpetua por un crimen de los más graves de nuestro código penal», señaló Burlando, quien consideró que los agresores de Fernando actuaron con «alevosía».
El abogado se refirió al crimen de este joven de 19 años como un hecho «trágico para la sociedad», en el cual la víctima «sufrió el karma de todas estas bestias», a las que calificó como «gente que tiene como modo de vida la violencia» y «que no puede pisar la calle».
Burlando también explicó que tomó la decisión de representar legalmente a la familia de la víctima porque su madre dijo que Fernando «tenía un proyecto de profesión de abogado», similar al que encaran en su estudio, y eso fue muy «movilizante» para él.
Rueda de reconocimiento
Uno de los testigos de que participó este jueves de las ruedas de reconocimiento de los acusados del crimen de Fernando identificó a Enzo Comelli, uno de los rugbiers detenidos como «partícipes», como la persona que le aplicó el «primer golpe» a la víctima.
Mientras que Alejo Milanesi, otro de los rugbiers imputados, aseguró que no tuvo «nada que ver» con el crimen a la salida del boliche, según reveló este jueves uno de los jóvenes que fue seleccionado para integrar las ruedas de reconocimiento ordenadas por la fiscal del caso.
El testimonio fue aportado por Máximo Carrillo, un joven de 19 años oriundo de la localidad bonaerense de Canning que fue seleccionado por la Justicia para sumarse a la mencionada diligencia.
Este joven contó a Télam al retirarse de la sede de la secretaría de Seguridad del municipio que conversó con Milanesi antes de ingresar a la sala donde se practican las ruedas por parte de los testigos.
En ese momento, el imputado negó su participación en el crimen de Báez Sosa ocurrido el viernes último frente al boliche Le Brique.
El fiscal general de Dolores, Diego Escoda, aseguró que se completó la primera rueda de reconocimiento y que estas jornadas se extenderán al menos hasta el martes próximo en la Secretaría de Seguridad de la localidad balnearia.