Una treintena de policías comenzaron a buscar esta mañana elementos que puedan referir al paradero de Gissella Solís Calle, la odontóloga de 47 años que desapareció en La Plata hace nueve días, en campos situados sobre la ruta 6, en una zona limítrofe entre ese distrito y San Vicente.
La búsqueda se concentraba en la zona de Etcheverry, partido de La Plata y participaban policías de a caballo.
Según trascendió, los policías, que actuaban bajo directivas de la fiscal platense Ana Medina, supervisaban un área marcada a partir del seguimiento de los movimientos de la pareja de Solís Calle, Abel Casimiro Campos, un ex combatiente de Malvinas y empleado de la obra social IOMA que se suicidó al efectuarse un disparo en la cabeza en un hotel céntrico el pasado domingo.
En las últimas horas, también trascendió que otro punto de atención era la cercana localidad de Guernica, donde Campos se habría encontrado con un amigo un día después de la desaparición de la mujer.
Este miércoles, Mariela, hermana de la odontóloga desaparecida, confirmó que en uno de los bolsillos de Campos se encontró un veneno.
Según indicó un diario local, se trataría de Lannatte, un insecticida cuya ingesta puede ocasionar dolor de cabeza, mareo, fatiga, debilidad muscular, letargo, pérdida de conciencia, náuseas, dolor abdominal, lagrimeo y salivación anormales.
La hipótesis del envenenamiento es reforzada a partir de que en la casa de Solís Calle fueron encontradas dos copas con restos de vino y de vómito en el baño.
Por otro lado, se supo que se halló restos de sangre en la camioneta que usaba Campos y, además, se conoció que el hombre hizo lavar la camioneta en forma profunda al día siguiente de la desaparición de su pareja.
Hallan manchas de sangre en la camioneta del novio de la odontóloga desaparecida