En la previa era uno de esos partidos que prometían y vaya si cumplió. Más de cinco horas de un alto nivel que armaron un gran espectáculo. Nalbandian y Hewitt dejaron todo en el court y brindaron lo que seguramente será uno de los grandes partidos que tendrá el torneo en esta edición 2011.
Hewitt arrancó más enfocado que el argentino en el primer set y con pelotas profundas y variadas se hizo dueño del desarrollo del encuentro. Así logró quedarse con el primer parcial por 6-3 ante un Nalbandian un tanto estático, al que le costó meterse en el ritmo del partido.
El comienzo del segundo set fue clave. El australiano estuvo 1-0 arriba y con chances de quebrarle el saque al cordobés, pero Nalbandian pudo mantener su servicio y en el siguiente juego le rompió el saque a Hewitt.
Con ese quiebre, el unquillense pudo sacar una pequeña luz de ventaja, que luego le permitió quedarse con el parcial, en el que dominó a su rival a partir de un gran juego desde la base, con el que buscó todo el tiempo profundidad y ángulos.
Y en el tercer set, el argentino directamente golpeó de entrada al quebrarle el saque en el primer juego, aunque Hewitt se recuperó y le devolvió la gentileza en el cuarto game para ponerse 2-2.
El australiano mostró una enorme recuperación y sacó lo mejor de su tenis. Tras desperdiciar dos sets points en el 5-2 con el saque del cordobés, Hewitt cerró el tercer parcial con su saque por 6-3.
En el comienzo del cuarto fue Hewitt el que quebró primero y con esa ventaja el australiano comenzó a aprovechar los errores del cordobés para dominar el cotejo.
Nalbandian estuvo a un punto de quedar al borde del abismo cuando sacó 1-3 y 0-40 pero pudo mantener su saque y así seguir en el partido.
Así como en el tercer set Nalbandian pasó de 2-0 a 2-5, en el cuarto parcial se recuperó de 1-3 a 5-3 y 30-0.
Pero Hewitt recuperó el rompimiento y emparejó las cosas. Los dos jugaron mucho mejor cuando estaba abajo en el marcador que cuando tuvieron que ir a definir el encuentro. Así se llegó al tie break en ese cuarto parcial en donde el cordobés dio una clase de lujo y se quedó con la definición por 7-1 forzando el quinto set.
El parcial arrancó parejo con cada tenista manteniendo su saque, pero en el tercer juego sorprendió David y quebró el saque del australiano.
El parcial se asemeja al último round de una pelea. Los dos ganan puntos y también cometen errores. Nalbandian sacó 5-3 arriba pero no pudo cerrar el partido. Hewitt quebró para luego mantener su saque y dejar todo 5-5.
Así se mantuvo hasta el 7-7, con una mínima ventaja para el local que dispuso de dos match points para cerrar el encuentro.
Pero apareció David en toda su dimensión. En el primero hizo saque y red y definió con un toque soberbio y en el segundo con una volea cruzada para seguir con vida.
El cordobés sacó fuerzas de donde no tenía para quebrar nuevamente y quedar 8-7 arriba.
Una nueva oportunidad para cerrar con su saque. Y esta vez sí. No la iba a dejar pasar. Y con un par de tiros propios de su categoría y un globo sublime para cerrar el encuentro, Nalbandian dejó en el camino al local tras cinco maratónicos sets.
C’mon David, gritaron los argentinos allí presentes y disfrutaron del triunfo ante Mr.C’mon que esta vez quedó con su grito atragantado y viendo como el festejo no le pertenecía.
En la segunda ronda, el cordobés jugará con el lituano Richard Berankis, quien hoy le ganó al australiano Marinko Matosevic por 6-4, 6-2 y 7-5.