El ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Juan Cabandié, afirmó en su visita a la ciudad entrerriana de Paraná que continúa «exigiendo a la Justicia que trabaje para que los habitantes de la costa del (río) Paraná puedan vivir sin respirar humo», luego de los incendios provocados en las islas del delta durante 2020 y 2021 y aseguró que los focos ígneos «disminuyeron respecto al año pasado».
«Tenemos que hacer un cambio cultural de paradigma y de métodos, pero de manera sostenible, por eso trabajamos en una concientización social», dijo Cabandié.
El ministro nacional, junto al gobernador entrerriano, Gustavo Bordet, realizaron este martes una serie de actividades y recorrida de obras públicas ejecutadas entre Nación y la provincia de Entre Ríos.
Tras entregar maquinaria para la Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos en Paraná, Cabandié y Bordet se trasladaron a la localidad de El Pingo para recorrer la obra de la futura planta de reciclaje, en el marco del «Plan Integral Casa Común».
Respecto a la bajante del río Paraná, Cabandié la definió como «una metáfora que debe alertar sobre la necesidad que tenemos todos de mitigar y adaptarnos al cambio climático, porque los bienes naturales que venimos explotando desde del siglo 19 son recursos escasos”.
Sobre los incendios en el Delta indicó que «se comenzó la licitación y compra de cinco faros de conservación .Los faros incluyen infraestructuras, cámaras, drones y equipamientos para fortalecer la presencia institucional y operativa en el territorio, monitorear y desarrollar una detección temprana, prevención y disuasión de incendios para luego combatirlos».
«Nos tiene que llamar la atención a todos como sociedad -continuó-, ir mitigando y adaptándonos porque los recursos naturales son los bienes escasos del siglo XXI, y sin esos recursos no vamos a conocer la vida como la conocemos hasta ahora».
Cabandié llamó a un «cambio de paradigma, de métodos y cultural», aunque «siempre falta algo, y a veces la Justicia tiene tiempos que no son los de la gente».
En ese sentido, recordó que durante 2020 y 2021 se generaron numerosos incendios en el delta del río Paraná que afectaron el ecosistema y la flora y fauna autóctona, pero también la vida urbana colmando de humo y cenizas las principales ciudades costeras.
Actualmente se encuentran en investigación varias causas judiciales, ya que se consideró que los fuegos fueron generados para «obtener rebrote como forraje para el ganado, limpieza de la zona y pesca y caza».
«En un incendio forestal hay tres actores: el que prende, el que tiene que apagar y el que tiene que reprender, pero si falla la Justicia -que es quien tiene que reprender- se va a seguir haciendo», añadió.
Finalmente, pidió «seguir exigiendo a la Justicia que trabaje para que todos los habitantes de la costa del Paraná puedan vivir sin respirar humo».