Un hombre de 33 años y un muchacho de 23 quedaron detenidos este jueves sospechados de ser los autores de la balacera que sufrió una familia el 14 de enero del año pasado en pasaje Deliot al 5300. Ese día, cuatro mujeres, un joven de 20 años y una nena de 9 años resultaron heridos. En los allanamientos, el personal de la Policía de Investigaciones (PDI) y de la Tropa de Operaciones Especiales (TOE) incautó un kilo y medio de marihuana, 31.000 pesos y armas de fuego.
Eran los primeros minutos del 14 de enero de 2017 cuando un llamado anónimo al 911 alertó a la Policía que en la esquina de Deliot y Larrea había personas heridas de arma de fuego. Llegaron los uniformados de Comando Radioeléctrico y se encontraron con una adolescente. La chica contó que estaba en la vereda cuando tres hombres se bajaron de dos autos con armas en las manos, la empujaron, se metieron a su casa y sin mediar palabras abrieron fuego contra su familia.
Producto de la balacera, la dueña de casa María Marta N., de 37 años, recibió al menos tres tiros en tórax y abdomen; su hijo Brian N., de 20, quedó con heridas de balas en tórax y pierna izquierda; la pequeña Iris P., de 9 años terminó con un proyectil en el pecho. Las víctimas fueron trasladadas por los vecinos hasta el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca). A su vez, Claudia A., de 24, recibió un tiro en la pierna izquierda; Érica N., de 14, tuvo un roce de bala en la cadera del lado izquierdo y Georgina G., de 20, un balazo en la pierna izquierda.
Trascendidos dieron cuenta en esa oportunidad que el ataque se debió a que el joven baleado había chocado su moto contra un automovilista, quien resultó ser un vendedor de estupefacientes. Ofuscado por el choque, el narco baleó a todos los habitantes de la casa para tomar venganza por el desaire del muchacho. Estos dichos no fueron confirmados por las fuentes oficiales, quienes indicaron entonces que no estaba establecido el móvil.
Luego de un año de investigación, el personal de la sección Contrainteligencia de la PDI y de la TOE, bajo la supervisión de los fiscales Fabbro y Sosa de Flagrancia, realizó tres allanamientos y apresó a dos de los sospechosos de ser los autores del brutal ataque a balazos en barrio Triángulo.
A David A., de 23 años, los uniformados lo detuvieron en una vivienda de Calvo al 1300 y le secuestraron un revólver calibre 38. En la misma cuadra, cayó Cristian C., de 33 años, a quien le incautaron una pistola 9 milímetros, una escopeta calibre 16, proyectiles, alrededor de un kilo y medio de marihuana, 31.000 pesos en efectivo, 20 celulares y cinco tablets. Y en Gazcón al 3000 hallaron celulares y dos handies sintonizados en la frecuencia policial.
Los apresados quedaron a disposición de la Justicia provincial. Además, Cristian C., de 33 años, fue puesto a disposición del fuero federal.
El móvil de la balacera
La hipótesis que habían deslizado los vecinos de barrio Triángulo tras el ataque tomó fuerza este jueves, luego de que los uniformados detuvieran a los dos muchachos en la cuadra de Calvo al 1300, en barrio Parque Casas. Esa zona era territorio para narcomenudeo de Olga “Tata” Medina hasta que en 2014 la Policía Federal la detuvo junto a muchos de sus lugartenientes entre los que también se encontraban policías de la provincia. Ese vacío en Parque Casas y la Cerámica fue ocupado por un grupo de jóvenes cuyo liderazgo le adjudican a Emanuel Sandoval, apodado Ema Pimpi.
Además de purgar una condena a tres años de prisión por el atentado que en 2013 sufrió la casa del entonces gobernador Antonio Bonfatti, Ema Pimpi fue detenido el mes pasado, al igual que a su hermano, y acusado por una doble tentativa de homicidio ocurrida en junio pasado en Parque Casas. Los investigadores indicaron que una de las hipótesis del doble ataque a balazos se enmarca en disputas por el control de territorio para el narcomenudeo.
