Si el homicidio de Martín Fantasma Paz –ocurrido hace casi un año– fue la excusa perfecta para desbaratar la banda Los Monos, se debió precisamente al posterior asesinato de su líder, Claudio Ariel “Pájaro” Cantero. Su muerte, a fines de mayo pasado en la puerta de un boliche ubicado en el límite entre Villa Gobernador Gálvez y Rosario, prometió un reguero de sangre, profecía que comenzó a cumplirse horas después, con crímenes organizados a plena luz del día en el macrocentro rosarino. Había que frenarlo y así se hizo. Cientos de allanamientos, detenciones y secuestro de estupefacientes, armas de guerra y autos de alta gama calmaron las aguas bajo la imputación genérica de asociación ilícita. En ese marco se desdibujaron las internas entre las bandas que se disputan el negocio de la droga y antiguos socios se transformaron en letales enemigos.
Así, Luis Orlando “Pollo” Bassi, sobre quien pesan varios pedidos de captura, figura como el ideólogo del crimen de Pájaro Cantero.
Ayer, varios allanamientos ordenados por el juez de Instrucción Hernán Postma derivaron en el arresto de dos de sus hombres, a quienes les secuestraron un miniarsenal, ropa de policía y documentación de importancia para esclarecer el crimen del jefe narco. Con lo cual ahora son cuatro los detenidos por este homicidio.
Uno de los allanamientos tuvo lugar ayer a la mañana en un departamento Fonavi ubicado en Mármol al 2900, de Villa Gobernador Gálvez, donde fueron incautadas cuatro armas de fuego (calibres 11.25, 38, 32 y 12.70) con sus respectivas municiones, varios celulares, una motocicleta de 250 centímetros cúbicos y un Fiat Duna.
Allí fueron detenidos dos integrantes del círculo más íntimo del Pollo Bassi, que la Policía identificó como Osvaldo “Popito” Z., de 21 años, y Héctor G., de 29, éste último con una captura abierta del juzgado de Ejecución penal ya que debía estar cumpliendo condena en la cárcel de Piñero.
En ese mismo domicilio había sido detenido el pasado 17 de junio Facundo “Macaco” Muñoz, uno de los acusados de dar muerte a Pájaro Cantero, durante un allanamiento realizado por efectivos de la División Judiciales, quienes aseguran que en esa oportunidad se les escapó Pollo Bassi, sindicado ideólogo del crimen, quien habría presenciado el homicidio desde un auto en compañía de Popito.
Por el mismo homicidio se encuentran prófugos Milton Damario, a quien le achacan ser el primero que le disparó a Cantero, y un tal Tetón, quien habría “rematado” al Pájaro junto a Macaco, ante la presencia de otro imputado que tiene captura identificado por el apodo de Jerry. El primer detenido por el caso fue Milton César, quien luego pidió falta de mérito, pero el juez aún no se expidió.
El segundo allanamiento de ayer se realizó en un domicilio de Guido y Spano al 1900, también de Villa Gobernador Gálvez. Allí fueron secuestradas otras tres armas de fuego calibre 32, 38 y 9 milímetros y municiones para fusil FAL. También fueron incautadas prendas de vestir de policías, como gorras, remeras, pantalones, dijo un vocero de la causa quien agregó que además se secuestró gran cantidad de documentación de “suma importancia” para la causa.
Claudio Ariel “Pájaro” Cantero fue acribillado a tiros en la madrugada del domingo 26 de mayo pasado, en la puerta del boliche Infinity Night, ubicado en el límite entre Rosario y Villa Gobernador Gálvez, donde había llegado en auto con otros jóvenes momentos después de abandonar la bailanta rosarina Yamper, actualmente clausurada.
Tenía 29 años, lideraba junto a su padre y hermanos la organización conocida como Los Monos, que desde hace más de una década viene ganando terreno en toda la ciudad y actualmente está siendo investigada por asociación ilícita.
El Pájaro era cuñado de Martín “Fantasma” Paz, en su momento miembro de la organización, quien fue acribillado a tiros el 8 de septiembre pasado cuando conducía una flamante cupé BMW junto a su esposa e hija, por 27 de Febrero y Entre Ríos, en horas de la tarde.
La muerte de Pájaro desató una escalada de violencia sin antecedentes en los últimos años que siguió con el asesinato, escasas horas después de su muerte, de Diego “Tarta” Demarre, quien estaba a cargo del boliche en el que lo mataron. Si bien los rumores indican que era su testaferro, se lo acusa de haberlo “entregado” al Pollo Bassi, sindicado autor intelectual del asesinato. Al día siguiente hubo otros dos asesinatos vinculados con el homicidio del Pájaro.