El emblemático músico brasileño Caetano Veloso, que el 19 de septiembre llegó a la Argentina para ofrecer tres shows, uno de ellos en Rosario, junto con sus hijos Moreno, Zeca y Tom, dijo en una charla que mantuvo con la agencia oficial de noticias Télam que tiene “gran dificultad en aguantar espíritus reaccionarios”, al referirse a la situación que se vive en su país.
“Es imposible no sentir que hay una atmósfera rara, difícil. Respeto la necesidad que tienen las sociedades de conservarse, pero tengo gran dificultad en aguantar espíritus reaccionarios. Espero que tengamos sagacidad suficiente para utilizar las energías históricas que brotan de esas dificultades y podamos caminar mejor”, aseguró el autor de “Branquinha” y “Leoncinho”, entre tantísimas canciones inmensas, en relación con la compleja situación que vive su país a partir de las políticas de derecha puestas en marcha desde la asunción en el gobierno del presidente Jair Bolsonaro.
El músico bahiano, convertido en una de las referencias musicales y culturales ineludibles de su país desde su aparición a fines de los años 60, se presentará en la Argentina en nuevo formato, acompañado por sus hijos Moreno, Zeca y Tom, a los que definió como “todos buenos músicos, cada uno muy diferente de los otros, pero muy dentro de un timbre familiar”.
Los shows de este inusual cuarteto musical encabezado por uno de los músicos brasileños más queridos en la Argentina desde el fulgurante arribo al país del Tropicalismo a finales de la década del 70, llevan por título Ofertorio y se desarrollaron el 19 y 20 de septiembre en el porteño teatro Gran Rex para llegar a Rosario este domingo 22, en un esperado show que tendrá lugar en el teatro El Círculo.
Antes habrán pasado por ciudades como Barranquilla, Medellín y Bogotá, y luego seguirán de gira por Montevideo, Santiago de Chile, Belo Horizonte, San Salvador, San Pablo y Río de Janeiro.
“Moreno, a los nueve, escribió la letra de una canción mía, después dejó de cantar por unos años y cuando volvió lo hizo de forma muy refinada. Zeca empezó con música electrónica, pero luego cantaba cosas que escribía con su voz aguda. Tom, de niño, sólo se interesaba por el fútbol, pero cuando empezó a tocar la guitarra probó ser el más musical de nosotros cuatro. Todos son buenos, cada uno muy diferente de los otros, pero muy dentro de un timbre familiar”, aseguró Veloso sobre sus hijos.
En familia
Respecto de cómo fueron los ensayos para este nuevo proyecto, el músico expresó: “Fueron muy buenos, los tres son muy inteligentes y muy verdaderos; no hicimos demasiados esfuerzos ya que todo salía con naturalidad y casi sin dimensión profesional, aunque hoy vemos que el show tiene estructura, aun cuando lo hicimos casi sin poder pensar la manera de arreglarlo”.
El creador de Fina Estampa también se refirió al armado del show en relación con los roles y de cierta horizontalidad democrática que primó a la hora de tomar las decisiones. “Ha sido muy horizontal. Tom dijo que tendríamos que cantar «O Seu Amor» de Gilberto Gil, y empezamos a buscar las voces; pedí a Moreno que cantara «Um Passo à Frente» y Zeca decidió tocar el bajo; pedí a Zeca para hacer la programación del funk que yo había compuesto, y soñaba que Tom bailara, cosa que él dijo que no haría pero terminó por hacer; tuve la idea de cantar un tema religioso que había compuesto para la misa de los 90 años de mi madre y eso vino a ser el título del show, Ofertorio. Fuimos haciendo de a poco y al final tuvimos más cosas de las que entran en el tiempo de un show”, expresó con simpleza.
Caetano habló también respecto de cómo piensa esta reunión casi acústica, familiar, de una música que parece más creada en una sobremesa o reunión íntima que en un escenario. “Simplemente es natural: guitarras acústicas, voces, canciones referentes a nuestros sitios, nuestra historia, nuestras personas queridas. Pero todo tiene que decir algo en su estructura y el show lo hace”, expresó.
El músico, que en los últimos años estuvo en Argentina con formatos acústicos, con María Gadú, Gilberto Gil y ahora con sus hijos, habló también de la posibilidad de un regreso a futuro a sólo guitarra con sus canciones. “Nada es imposible. Cuando me preguntan qué concierto me gustó más en mi vida, siempre pongo primero el de Circulado en Realengo, Río. Pero el segundo que me viene a la cabeza es uno que hice solo con voz y guitarra en Buenos Aires, también al aire libre y gratis, para una inmensa multitud que estaba concentrada, atenta e inteligente como sólo el público de Buenos Aires sabe ser. El de Realengo sólo está en primer lugar porque había una banda, y me gusta más poder tocar con personas que sepan hacerlo mejor que yo, pero volvería a cantar solo en Buenos Aires en cualquier tiempo”.
El músico lleva casi 40 años de relación con la Argentina, donde siempre ha sido muy querido y adonde trajo sus distintos proyectos musicales. De hecho, respecto de su relación con el público argentino, expresó finalmente: “Encuentro en el público argentino una concentración, un silencio seguido de entusiasmo inteligente como no encuentro en ningún otro sitio del mundo”.
Para agendar
El músico brasileño Caetano Veloso junto a sus hijos Moreno, Zeca y Tom presentará <Ofertorio< en Rosario, en el teatro El Círculo de Laprida y Mendoza, el domingo 22 de septiembre, a partir de las 20. Las entradas ya se encuentran a la venta