En los últimos dos días se registraron en la ciudad los récords históricos de consumo en los servicios de energía eléctrica y agua. El propio Daniel Cantalejo, presidente del directorio de la Empresa Provincial de la Energía, anunció el pico histórico de consumo, 1.695 megavatios, en una conferencia de prensa convocada para explicar cómo se está trabajando frente a los cortes de suministro. En el final de esa misma reunión, el secretario de Servicios Públicos de la provincia, Alejandro Boggiano, se refirió al récord de consumo de litros de agua por habitante: “Llegamos a consumir 550 litros por habitante, un récord histórico, cuando en realidad el consumo promedio es de 200 litros”, se alarmó el funcionario.
En la conferencia de prensa convocada en sede local de la EPE, donde también estuvo presente el ministro de Aguas y Servicios Públicos, Antonio Ciancio, Cantalejo explicó las razones de los cortes, entre las que consideró “la existencia de 420 edificios nuevos y el uso de aire acondicionado por parte del 80 por ciento de la población”, sin omitir referencias a las anteriores gestiones de los gobiernos justicialistas. El funcionario se ocupó de las administraciones que “no invirtieron ni actualizaron los valores de la tarifa”, y a Ciancio le tocó hacerse cargo de los senadores del PJ, acusándolos de haber frenado fondos que se usarían en la EPE y el nombramiento de cien nuevos cargos en la planta de personal de la empresa.
Cuando los periodistas quisieron trasladar la ansiedad de los usuarios que se ven afectados por los cortes, tanto Cantalejo como Ciancio se ocuparon de aclarar que no hay soluciones en el corto plazo. El director de la EPE indicó que para solucionar el problema “habría que reemplazar 45 kilómetros de cableado de media tensión, 690 de baja tensión y habría que agregar cuatro estaciones transformadoras más. Todo eso representa una inversión de 1.539 millones de pesos”.
Tan lejos están las soluciones que legítimamente esperan los usuarios como el número que está destinado en el presupuesto para invertir en la infraestructura de energía eléctrica este año: 250 millones de pesos. Eso significa que a este ritmo se tardarían seis años en optimizar la red, aunque en seis años el consumo también sería superior al actual.
Si algo quedó claro ayer es que mientras sigan las altas temperaturas seguirán los cortes. Los funcionarios descartaron por el momento cortes rotativos, pidieron solidaridad al resto de los rosarinos (sobre 300 mil usuarios, 10 mil sufrieron cortes ayer) y no descartaron implementar algún tipo de resarcimiento a quienes se ven afectados materialmente por el corte del servicio. “Siempre se puede ser el primero e innovar en la materia”, dijo Ciancio, quien tendrá una reunión sobre este tema con el defensor del Pueblo, Edgardo Bistoletti (ver aparte).
Cantalejo explicó que el gobierno “hizo inversiones en dos años similares a las que se venían haciendo en la empresa en períodos de cuatro años”, y destacó haber elevado las estaciones transformadoras de cinco a ocho: “Hicimos tres en dos años, cuando las otras cinco se hicieron durante veinte años”, dijo el titular de la EPE.
Sobre la extensión de los cortes, el funcionario aclaró que las fallas “se producen en la red subterránea, lo que nos obliga a abrir pozos para repararla, teniendo especial cuidado con los otros servicios (teléfono, gas y agua) cuyas redes están tendidas sobre nuestros cables. Todo esto lleva tiempo y debe hacerse con personal especializado”, explicó.