Una de las cinco personas heridas en la balacera que se desencadenó el sábado pasado a pocos metros del camping de Camioneros en Pérez, donde se desarrollaba una asamblea del gremio, murió ayer como consecuencia de “dos heridas” provocadas con “un arma de fuego de tamaño importante”, según revelaron ayer desde el Hospital Clemente Álvarez. En tanto, otro de los heridos se encontraba en estado delicado y su pronóstico era reservado.
Además, según fuentes policiales, en la tarde de ayer personal de limpieza del camping encontró una pistola 9 milímetros en la tierra removida de un árbol caído. El fiscal, por su parte, ya tiene en sus manos grabaciones de las cámaras de seguridad de la empresa Transener, ubicada en el lugar de la balacera.
“Tenemos dos heridos de bala internados, y esta madrugada falleció uno de ellos”, confirmó el jefe de la guardia del hospital Clemente Álvarez, Sergio Trevisán.
De los cinco heridos, de acuerdo con Trevisán, uno falleció en la madrugada de ayer y fue identificado como Nicolás Savani, de 27 años, mientras que el otro lesionado, reconocido como Diego Castaña, de 31, continuaba internado con heridas de gravedad. En tanto, los otros tres hombres que sufrieron lesiones menores recibieron el alta médica.
“El paciente fallecido sufrió dos heridas de armas de fuego: una por el cuello y la boca y otra en el tórax y el abdomen”, precisó el jefe de la guardia hospitalaria y dijo que los disparos se realizaron “indudablemente con un arma de un tamaño importante”.
“Cuando llegó, el señor tenía heridas muy importantes, con un sangrado muy importante. Fue operado inmediatamente al ingreso, y allí se le constataron lesiones de gran magnitud. Logró superar la intervención quirúrgica, pero durante la madrugada falleció”, afirmó Trevisán.
Además, el médico sostuvo que el paciente que aún se encuentra internado tiene “solamente una herida”, la cual “compromete el abdomen” y que, tras haber sido operado, “está cursando su primer día en estado estable, pero con cierta reserva de pronóstico”.
Hallaron un arma
En la tarde de ayer, personal de la Comisaría 22ª de Pérez secuestró en el camping del sindicato de Camioneros una pistola 9 milímetros y la remitió para realizar peritajes balísticos, luego de que personal de limpieza del predio la encontrara entre la tierra removida de un árbol caído.
El fiscal de la causa, Adrián Spelta, en diálogo con El Ciudadano, dijo no tener conocimiento del hallazgo, pero reveló que ya tenía en su poder grabaciones de las cámaras de seguridad de la empresa Transener, ubicada en el lugar donde se desarrollaron los hechos.
Spelta adelantó que hoy brindará una conferencia de prensa para aportar detalles de la investigación.
La balacera
La balacera se desató en el mediodía del sábado, cuando cuatro ómnibus con afiliados que responden al sector del secretario general Marcelo Dainotto debieron detener su marcha hacia la asamblea que se desarrollaba en el camping del sindicato, en el camino que conecta Pérez con Funes, ante el bloqueo de la ruta, según relataron fuentes del gremio.
En ese momento, los ocupantes del primero de los micros, donde se encontraba Nicolás Savani, descendieron y recibieron una ráfaga de no menos de 50 disparos, según las primeras estimaciones.
A pesar de todo, a pocos metros de allí se desarrollaba una asamblea en la que participaba el otro sector de la interna, que responde el secretario gremial de Camioneros y titular de la CGT local, Rubén López.
“Nos enteramos por la prensa, porque el hecho ocurrió a 1,5 o 2 kilómetros del predio. Aquí no pasó nada. Participaron entre 1.100 y 1.200 afiliados, quienes tenían que estar correspondientemente identificados”, dijo el abogado Ciro Quagliati, identificado con el sector de López, para desestimar una posible relación entre los hechos.
“El país va a decir que el muerto lo tiene Moyano”
La muerte de un afiliado del gremio de Camioneros que el sábado pasado pretendía participar junto a un numeroso grupo de una asamblea en Pérez y fue “recibido” a balazos por un grupo de choque, quedó inmersa en la pelea que en los últimos dos años desarrollaron Marcelo Dainotto –secretario general del gremio local– y Rubén López –titular de la CGT Rosario y secretario gremial de Camioneros– y amargó al extremo a Hugo Moyano, el líder de Camioneros a nivel nacional.
Según fuentes del gremio, Dainotto y López fueron distanciándose en los últimos años, en especial desde la asunción del segundo al frente de la CGT Rosario.
Entre las especulaciones que se hacen en el gremio de esta división y de su desenlace, existe la sospecha de que fuera en realidad un ataque directo a Hugo Moyano, en el medio de su pelea con el gobierno nacional.
“Nadie va a hablar de López o Dainotto, el país va a hablar de que el muerto lo tiene Moyano”, argumentó una alta fuente del gremio en la agitada jornada de ayer.
Piden nulidad de asamblea
Entre las decisiones que se tomaron en la asamblea del sábado pasado, de la que no pudo participar un numeroso grupo identificado con Dainotto, “se resolvió realizar una auditoría contable y suspender preventivamente al secretario general de la entidad, Marcelo Dainotto, y al tesorero, Miguel Ángel Caichiolo”, explicó a la prensa el abogado Ciro Quagliati, del sector de López.
Esta decisión no fue aceptada por el sector de Dainotto que anunció que hoy concurrirá a la Secretaría de Trabajo para que se declare nula la asamblea para luego se trasladarse a la sede del gremio, que fue ocupada el mismo sábado por un grupo que responde al sector de López. Además, la conducción del gremio informó que presentará las actas ante escribano público donde 4 de los 14 integrantes de la Comisión Directiva que votaron a favor de la auditoría contable reconocen que firmaron porque fueron “intimidados” y anunciaron que otros dos seguirán el mismo camino.